Escribe: Víctor Tapia

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En el presente día, el primer film argentino y sudamericano de rock cumple 60 años. Mientras los «periodistas» e «historiadores» nos bombardean con festejos rutilantes por los supuestos 50 años del rock «nacional»,  hoy celebra su aniversario una película que prueba que el rock argentino existe al menos desde hace 60 años. Durante décadas han mantenido bien olvidada a Venga a Bailar el Rock, la ópera prima de Carlos Marcos Stevani en la que actuaron próceres como Eddie Pequenino y Éber Lobato. 

  Universo Epígrafe ya le había dedicado un artículo extenso el año pasado , subiendo extractos nunca publicados en la web. El film nunca fue subido a internet, con excepción de una subida a Emule que nunca tuvo gente conectada para compartirla.  La obra tampoco fue editada en DVD o VHS , y solo pudo verse en algunas emisiones de Canal Volver. Los canallas que no han hablado de este film en ninguna de sus «investigaciones»  o que incluso lo han despreciado con prolijas mentiras aprovecharon las emisiones de Volver para atacar a Universo Epígrafe.  «No es ninguna película maldita, si se la podía ver en el cable siempre», repitieron como loros estos gerontes nerviosos a causa de que la juventud está emprendiendo de una vez por todas una historia completa del rock argentino sin discriminaciones ni estigmatizaciones.

Poco les importa a estos monaguillos de la desmemoria que el 37% de la población argentina no posea TV paga, y que Volver esté ausente de la grilla de cableoperadores tan  importantes como Telecentro. Pero no es difícil entender la razón que les lleva a no reparar  en estas limitaciones concretas y materiales. Su concepción de la cultura implica que ésta se mantenga resguardada por una elite y una intelligentzia pseudo rockeras, que aplauden a rajatabla a los héroes encumbrados por sus «historias» y vituperan todo lo que pueda hacerles mella.  Por eso mismo decidimos subir la película completa a Youtube, haciendo un rescate histórico sin precedentes que sienta las bases para un conocimiento completo de los orígenes de nuestro rock. Pero además, hicimos un informe completo de investigación repasando tanto las tergiversaciones y mentiras ridículas que hicieron sobre ella los «periodistas especializados» , como recuperando recortes de la prensa de 1957 nunca antes publicados en la web. Pasen y vean!

   Cosas que decíamos ayer: el ocultamiento historiográfico sufrido por Venga a Bailar el Rock antes de Universo Epígrafe

Antes de Universo Epígrafe, las menciones de la historiografía eran más que escuetas y evitaban profundizar en el incómodo film.  Su primera mención seguramente haya sido dentro del excelente artículo sobre los orígenes del rock argentino que publicó en 1978 Daniel Colao. No obstante, la nota no se detuvo para hablar extensamente de  la película. Víctor Pintos y Ezequiel Ábalos fueron algunos de los pocos que se atrevieron a mencionarla en sus más que recomendables libros. El periodista Claudio Kleiman también habló brevemente del film en una excelente nota sobre los orígenes del rock argentino publicada en la Rolling Stone de México.  Pero obras monumentales como la de Marcelo Fernández Bitar son totalmente incapaces de mencionarla en sus cuantiosas páginas. La mayoría de la bibliografía especializada la saltea por completo.

A los libros mencionados, podemos agregar  dos ejemplos más en los que el film se cuela de refilón: Historia del Baile de Sergio Pujol y Rockpolitik de Juan Ignacio Provéndola, el cual pese a hablar de ella no puede evitar en su subtítulo sostener que el rock nacional posee sólo 50 años. En ninguno de los casos citados hay un análisis pormenorizado del film tal como hemos emprendido nosotros, revelando un silencio extendido por años.  Pero hubo casos peores , en los cuales se llegó a mentir lisa y llanamente. Repasémoslo a continuación, no para reírnos sino para lamentarnos por tantos años de inexactitud en el periodismo musical argentino. 

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 Pese a poseer 544 páginas y reeditarse desde 1987, la obra de Bitar no menciona al film en ninguna de sus hojas. Imagen extraída de Tematika.com

 Diego Bruno escribía así en el portal Rebelde: «Con ese motivo se filma una primer película, que contenía rock o música de la nueva ola – como se la conocía en esos momentos – en Argentina, su nombre Venga a bailar rock. Con la actuación de Nélida Lobato. De ese film mejor no hablemos, pero quieren saber entre que artístas estaba mezclado el rock de aquel tiempo?, por ejemplo con Pedrito Rico. Recién sobre el final Eddie hace su show de 2 canciones, poco para una película de más de noventa minutos de duración, no?.» (Bruno; 2000)

Lo primero que se le podría corregir a Bruno es que el film se llamaba Venga a Bailar el Rock, no Venga a Bailar Rock. Lo segundo es que el término ´nueva ola´ era inexistente en los 50. La palabra fue impulsada por la RCA y su gerente general de la filial de Argentina Ricardo Mejía en abril de 1960, etiquetando a músicos como Rocky Pontoni, Marty Cosens y Mariquita Gallegos (Jiménez; agosto de 2002). Posteriormente  nombraría a los miembros del Club del Clan, pero también a los mismísimos Los Gatos: sus discos fueron etiquetados en Uruguay como Nueva Ola . E incluso Canal 13 presentaba a los grupos anglosajones del programa Shinding! como parte de la «nueva ola» (Antonelli; 2005; p. 76) , término tomado de la nouvelle vague francesa.

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Simple de Los Gatos editado en Uruguay como Nueva Ola.

El texto de Bruno aplica un anacronismo flagrante al llamar «nueva ola » a Pequenino e incurre en un error de apreciación histórica  al indignarse porque Pedrito Rico esté en el film. Como si en esa época en la cual se construía el rock en Argentina sobraran los músicos dedicados al género, o como si distintos estilos no  pudieran compartir cartel. Pero además, esto era moneda común en la filmografía internacional del rock . Leáse que escribe el erudito Michael Quebec  en el recomendable grupo de Facebook Hepcats Hangout! The History of Teen Culture 1954 to 1963 sobre el film The Girl Can’t Help It. Hasta en un film emblemático como este salían a la palestra artistas no rockeros.

Jayne Mansfield, Edmond O’Brien, and Tom Ewell were the stars, but the featured popular music acts included Little Richard, Fats Domino, Gene Vincent, Eddie Cochran, Nino Tempo, The Platters, Eddie Fontaine, Teddy Randazzo and The Three Chuckles, and The Treniers, with non-rock music acts Julie London, Ray Anthony, and Abbey Lincoln thrown in for good measure (well, nobody knew if Rock n’ Roll would actually last, or if it was just a fad (Quebec; 20 de noviembre de 2017=.

El texto de Bruno dice que Eddie toca al final de los «más de 90 minutos de duración del film», cuanto en realidad la película sólo dura 57 minutos con 11 segundos….   El primer tema tocado por Pequenino aparece ya en el minuto 25, y antes hay otras interpretaciones de rock como la de la orquesta Los Caribes o el tema que da título al film.

Jorge Warley y Gullermo Toscano García sostuvieron en El Rock Argentino en 100 canciones: Antología un disparate que revela que nunca vieron el film, pese a las finas palabras usadas. «El choque cultural-generacional – si es que se puede hablar de algo así- en este segundo caso, el que emblematiza Venga a Bailar el Rock, se atenúa. Los jóvenes tienen sus cosas,  pero son  buenos y talentosos, al final del camino se encontrarán con sus mayores que tienen cáscara dura y grave pero en el fondo nunca olvidaron el fuego innovador de la juventud. Esta segunda variante, dcho sea de paso , es la que engloba a todos los filmes de (otra vez ) Palito Ortega y otros  jóvenes cantantes similares, e incluso obras un poco posteriores como El Extraño de Pelo Largo , con Litto Nebbia, entre otros , primera y fallida película que se acerca un poco más específicamente al rock nacional»

La intepretación es muy bonita y seguramente podría engalanar a algún sesudo estudio cultural de nuestras universidades . Pero lamentablemente debemos decir  que el único mayor del film es el cómico Gran Kiki, quien actúa como productor del espectáculo. Los jóvenes son los protagonistas del film y actúan casi en soledad , encargándose de todos los detalles del evento. Los mayores aparecen muy pocas veces, por ejemplo cuando el dueño de la sastrería donde trabajan Éber, Nélida y Anchart los reta por ponerse a bailar rock mientras debían trabajar. Todo el «análisis»  de Toscano y Warley sobre la mitigación del choque cultural generacional  revela ser sólo un palabrerío de gente que no vio el fim pero quiere opinar igual debido a que el aire aún no ha sido privatizado. Podríamos discutir si Éber o Nélida podrían ser considerados jóvenes en esa época; también sería interesante saber si los estadounidenses se molestaban porque Berry y Halley ya superaban  los 30 años de edad cuando se hicieron famosos.

Lo bueno del humo vendido por Toscano y Warley es que no puede dejar de admitir continuidades ideológicas con El Extraño del Pelo Largo, film sumamente incómodo para la historiografía oficial al mostrar a a Nebbia codeándose con bandas despreciadas por ´comerciales´como Trocha Angosta o Con´s Combo.  Por si fuera poco, la película usa el término  «música beat » en vez de «rock nacional», mostrando que el último término aún no existía  en los 60.   Lo ´beat´ englobaba a grupos muy diversos entre sí evitando enfrentamientos tontos entre «progresivos » y ´comerciales´,  los cuales dominaron a nuestro rock antes de la llegada del » puro rock nacional» que desde los 80 se limitó sólo a  marginar a los grupos anteriores a Los Gatos o grupos contemporáneos que cantaban en inglés, como Los Walkers. 

¿Será por eso que Toscano y su amigo dicen que El Extraño del Pelo Largo  se «acerca un poco más al rock nacional´,  no pudiendo admitir que ni siquiera Nebbia se encuadraba en los 60 bajo ese oscuro término? Lo que les irrita a los autores es admitir que tanto Nebbia y Trocha Angosta como Pequenino y  Lobato eran argentinos que hacían rock, sin ninguna divisoria o grieta absurda. Pero lo que más les duele es que el  director de El Extraño de Pelo Largo fue la misma persona que hizo los diálogos adicionales de Venga a Bailar el Rock : Julio Porter. Quien quiera asegurar que hubo un quiebre en el rock argentino a partir de La Balsa tiene que chocar con continuidades tan evidentes y contundentes como ésta.

A las tergiversaciones históricas se han sumado tristemente algunos compatriotas iberoamericanos, como el chileno Yanko González y el catalán Carles Feixa. En La construcción histórica de la juventud en América Latina: Bohemios, Rockanroleros y Revolucionarios  mencionan al paso el film, no si antes entrecomillar provocativamente su característica de Película de Rock. ¿Tanto les duele que en el 57 el rock no sólo era practicado en nuestro país sino que era filmado y difundido masivamente?

Pero la chicana de las comillas es totalmente deslegitimada por los delirios con los que describen a los orígenes del rock argentino.  «Por entonces, casi todos los grupos locales tenían nombres en inglés: Los Bobby Cats (Billy Bond), Los Lions (Ricardo Lew), Los Dukes (Tanguito), Los Wonderfuls,  Los Ventures, The Shadows, entre otros. El modelo era el rock tipo americano, con letras y canto en inglés por fonética,  o el rock mexicano (estilo Enrique Guzmán y los Teen Tops ). A partir  del 64,  comienza a trocarse por el modelo Beatle y, gradualmente, por letras en idioma español. Un ejemplo de la transición realizada parece haber sido el grupo Los Guantes Negros, de Billy Bond , continuación  de los Bobby Cats , ya con nombres y letras en español y con una impronta Beatle […] hasta la primera mitad de los sesenta tenemos rock, pero no todavía ´rock ´nacional´. La adopción del español como lengua de rock local será el aspecto más sobresaliente de la nueva etapa, a la vez que una marca de identidad» (González y Feixa; 2013)

Hay un pequeño problema con lo que dicen Don Yanko y Don Feixa: todos los grupos mencionados por ellos cantaban en español . Ninguno cantaba en inglés: basta escuchar las grabaciones de Los Dukes , Los Wonderfuls o los testimonios de Bond sobre Los Bobby Cats y los Lions. Sorprenden las menciones a Ventures y Shadows ,  los cuales eran grupos anglosajones y no argentinos; aunque quizás hagan referencia a Las Sombras de Carlos Villalba , y algún otro grupo desconocido.  Otorguemosle ese changüi…. También es curioso que utilicen como argumento contra la inexistencia de un ´rock nacional´en los primeros 60 los nombres en inglés con que eran bautizadas las bandas. Una enumeración que no menciona a Los Wild Cats de Ciro Fogliatta, quienes también cantaban en español.  Con ese criterio, ¿excluimos a Sui Generis del rock nacional por no utilizar un nombre en castellano?

Pero lo más absurdo del texto reside en la antojadiza relación que establece  entre la beatlemanía y el canto en español.  Justamente  el furor por Los Beatles y la invasión uruguaya de grupos como Shakers o Los Mockers dispararon la aparición de una gran cantidad de grupos argentinos que cantaban en inglés , exactamente al revés de lo sostenido por Yanko y Feixa. Los mismos Guantes Negros, mencionados como ejemplos por los autores,  sólo grabaron dos temas en español y también usaban el nombre en  inglés  Black Gloves.

Si el rock en español existe desde el 56 con temas como Rock con Leche o la misma Venga a Bailar el Rock del film homónimo , ¿por qué Gonzalez y Feixa afirman que fue el aspecto más sobresaliente de la segunda mitad de los  60? Salvo Pequenino, The Rocklands, la orquesta de Osvaldo Norton,  Los Mak Ke Mac´s en su primer disco y la orquesta Los Comandantes, nadie cantaba en inglés hasta el 64. En noviembre del 65 Los Vip´s grabarían el primer LP de música beat argentina en inglés (Antonelli; 2005; p. 63) , dando inicio a una gran cantidad de bandas que cantaban en el idioma anglosajón. Los Búhos, Los Tammys, Las Mosquitas , Los Gatos Salvajes y el mismo Sandro siguieron cantando en español, aunque es cierto ( como lo atestiguan las grabaciones de La Escala Musical) que el inglés se multiplicó por doquier.  Pero quizás a González y Feixa  sólo le moleste que los argentinos imitasen el acento mexicano y tomasen prestados términos como ´chamaca´.  Entonces, ¿por qué no cuentan que Sandro ya se había desprendido totalmente del acento mexicano mucho antes de Los Gatos, cantando con acento netamente rioplatense tanto temas propios como covers? 

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Poster de Los Guantes Negros, que demuestra que también usaban nombre en inglés. Aportado por Zelmar Garín

Para estos dudosos «investigadores»  hasta el 64 había rock pero no ´rock nacional´….. No sabemos con qué criterio dicen que el rock hecho por músicos argentinos como Tanguito o Billy Bond dentro de nuestro territorio no era ´nacional´. Y además era un rock cantado en castellano, pese a lo sostenido por González y Feixa .  Por otro lado,  ¿Sumo y Fun People no son rock nacional?  Según el criterio de los autores no, ya que cantaban en inglés…

La mentira sobre el film pionero de nuestro rock llegó a Francia.  Alejandro Ricagno dijo en el número 8 del año 2000 de la revista Cinema Ameriq Latine 2000 que el film era  ´olvidable´, una consideración totalmente legítima a título personal si no fuera porque se encargó de agregar que Pequenino tocaba en la película covers de Bill Halley. Que alguien le avise que los dos temas interpretados por Eddie son composiciones de los argentinos Lalo Schifrin y  Éber Lobato, con letra del mismo Pequenino. Nada le costaba a Ricagno buscar en SADAIC los datos o mínimamente leer los créditos consignados en los títulos del film. Ésta es la rigurosidad crítica del periodismo e historiografía del rock argentino. Ahora pasemos a la realidad.

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        Captura propia que muestra que los temas interpretados por Eddie no son covers

 Todo lo sólido se esfuma: las repercusiones tras la reivindicación histórica de Universo Epígrafe

La nota de Universo Epígrafe ha sido un rotundo éxito desde su publicación el 28 de noviembre de 2016. Es la tercera nota más visitada del blog, con 849 visitas. Y posteriormente a ella, se ha compartido miles de veces.

Un pionero como Johnny Tedesco declaró públicamente días después que el film fue fundamental en su formación (Benini; 2 de diciembre de 2016) Y por si fuera poco, el reputado Fernando Martín Peña la proyectó en fílmico este año en el Malba. Fue la primera proyección pública en ese formato en 60 años. Lamentablemente, el MALBA le dio una difusión nula y pese a que fue proyectada un sábado, no asistieron más de diez personas. ¿Cuánto más esperaremos para volverla a ver en fílmico?

Universo Epígrafe ya había proyectado en abril  una grabación televisiva dentro de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA . La concurrencia superó a las 21 personas y entre ellas se contó el mismísimo Jorge Padín: el primer baterista del rock argentino y miembro de la banda de Eddie Pequenino. 

Jorge Padín explicando cómo el baile del rock era acusado de «diabólico». Video aportado por Marcelo Moré

Obviamente, los heraldos de nuestros periodismo cultural están dolidos a causa de que estas recuperaciones históricas empañan los festejos que realizan en este mismo año por «los 50 años del rock nacional». Revistas como La Cosa han proferido expresiones como éstas, dentro de una nota titulada sugestivamente ´50 años de rock nacional: ¿cuál es la peor película del rock argentino?  (S/A; 3 de julio de 2017):

«Si esto era rock, ¿que le quedaba a The Clash? Incluye la actuación del protorockero Eddie Pequenino, que en esta ocsion (sic) no es acompañado por su mágico trombón si no por su banda – Eddie Pequenino y sus Rockers. También aparece cantando Pedrito Rico, tan cercano al rock como tu mamá a Angelina Jolie.»

La Cosa deja en claro desde el título de su nota que el rock nacional posee 50 años, pero raramente empieza el artículo hablando de un film que cumple 60. Esta contradicción es solucionada con una ridiculización en la cual llaman «proto rockero «a Eddie Pequenino«. ¿Qué tiene de ´proto´ un rock and roll furioso como Aquí Viene el Rock o sus covers de Halley , los cuales eran tocados a un tempo más rápido que los originales ? Pero está claro que los genios de La Cosa nunca vieron el film, ya que dicen que Eddie dejó de lado el trombón  por su banda. Si al menos hubieran visto un  video de los que subió el coleccionista Carlos Molina, habría notado que Pequenino seguía tocando el trombón con solos excelsos en el marco de su banda:  la primera en dedicarse al rock en el país. 

No faltan en la nota de La Cosa los insultos a Pedrito Rico , artista español de primer nivel que llegó al país perseguido por Franco. Tampoco se escatiman expresiones machistas,  precedidas por una incongruente alusión a The Clash. ¿Sabrán los redactores anónimos que los hombres de Strummer homenajeron en un discazo como London Calling a un pionero del rock británico de la talla de Vince Taylor, versionando Brand New Cadillac? Cuánto debemos aprender aún de los ingleses en lo que respecta a mantener viva la memoria histórica…..

Ah: Universo Epígrafe quiere pedirle públicamente a La Cosa que mencione las fuentes de los videos del film posteados en su versión online. Carlos Molina y nosotros mismos fueron quienes los recuperaron.  Se ve que el plagio es más rockero que Pequenino, en su demente concepción.

  ¿Quien Quiere Diarios de Ayer?   Recuperamos los recortes de diarios y revistas de la época sobre el film!

Desde nuestra revista cultural proponemos otro tipo de periodismo, basado en la investigación y la rigurosidad. Por eso decidimos compartir con ustedes la manera en que la prensa retrató al film en su estreno, con recortes recuperados de la Hemeroteca de la Biblioteca Nacional.

Primero compartiremos las reseñas emprendidas por las revistas Antena y Radiolandia, las cuales tuvieron opiniones muy distintas pese a ser propiedad del mismo grupo editorial. Luego compartiremos recortes de los diarios La Razón, Clarín, La Nación y La Prensa que datan del mismo día del estreno de la película.

 60 años de oscurantismo silenciados en una sola nota.  Esperamos haber hecho el homenaje que se merecía este documento hasta ahora inconseguible y solicitado por periodistas de toda Iberoamérica.

Revista Antena

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Como su título lo sugiere, ´Venga a Bailar el Rock´es una producción sin mayores ambiciones, destinada a aprovechar un momento psicológico de una parte de la población: la gente joven, que se enloquece con los ritmos de la dislocada música americana que tantos adeptos conquistó en todo el mundo.

La película, dentro de esa tesitura se desenvueve sin mayores complicaciones y llena la función para la cual fue rodada.

´Venga a bailar el rock´ fue dirigida por Carlos Marcos Stevani y  en su desarrollo  intervienen entre otras figuras: Amelita Vargas, Alfredo Barbieri, Alberto Anchart (hijo), Éber Lobato,  Nélida Lobato, Delma Ricci y un cómico español, el Gran Kiki.»

Nótese que diez años antes de La Balsa, la prensa decía que la gente joven se enloquecía ´con los ritmos de la dislocada música americana ´

´                           Revista Radiolandia

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«Resultó de todo punto de vista infortunada la presentación de la película ´Venga a vailar (sic) el rock ´, presentada por el sello General Belgrano. Exceptuados los jóvenes asistentes que marginan la calidad de la película para seguir exclusivamente las alternativas del ritmo de la moderna expresión musical denominada ´rock´, gran parte del público exteriorizó su descontento y desaprobación con manifestaciones bien entendibles que van en directo desmedro de la aceptación de este film, lamentablemente deficiente. Desde sus primeras escenas en que la cámara recorre lugares característicos de Buenos Aires , se advierte la despreocupación del director, que descuida el equilibrio fotográfico, la intenalidad de luz y la armonía entre una toma y la subsiguiente. Algunas de esas tomas, al parecer de noticiarios, parecieran totalmente desprendidas de una filmación uniforme y correlativa. Este defecto, nunca presente en el cine nacional, que luce habitualmente gran calidad y técnica y particular eficacia en los hombres que atienden ese aspecto, se agrava con el desarrollo de la película, puesto que la filmación en interiores descuida detalles elementales de luz, encuadre y armonía. Se advierte, por otra parte, inexplicable descuido en algunos doblajes, fuera de tiempo. No contribuye, por cierto, a tornar medianamente soportable la película, la débil anécdota, un simple pretexto argumental para ubicar a lo largo del film conjuntos orquestales y artistas que interpretan sostenidamente bailes y canciones de ´rock´, Justamente la historia habla de un conjunto de aficionados a esa danza que busca de realizar un festival con artistas profesionales para la formación de un club que les permita seguir dedicados a esa gimnasia del ritmo musical que se llama ´rock´. En este aspecto podría radicar la única virtud del film, ya que el tema habla de aficionados y la película pareciera hecha por aficionados.

Intérpretes y dirección

La participación de Eddie Pequenino y sus Rockérs (sic), Los Caribes , Pedro Rico, Amelita Vargas y Alfredo Barbieri, actuando independientemente de la acción, de por sí desvaída y sin interés, les permite lucir a cada uno de ellos virtudes ya probadas.  Los animadores estables , digamos así, son los integrantes del conjunto que encabezan Éber y Nélida Lobato, participando también Alberto Anchart hijo y el cómico español Gran Kiki, reviviendo una serie de estampas, muchas de las cuales carecen de sentido. Marcos Stevani se llama el director que demuestra su escasa capacidad para la dirección: el desequilibrio de la narración, su censurable y simple manera de expresarse y el haber permitido recursos de dudoso buen gusto, son cargos que le corresponden por entero, demostrando que aún no está facultado para tan difícil cargo. Su labor ha hecho que se resintiese totalmente la eficacia del film, en el que solamente se salvan como intérpretes, Amelita Vargas y Alberto Anchart Hijo.

El Heraldo Cinematografista

Este recorte provisto por Luis Di Sarli proviene de una revista especializada en cine de la época, editada el 4 de septiembre de 1957.

Valores: Rock and roll

ÁNÁLISIS: Es una colección de números de rock and roll y otros ritmos modernos, un cha-cha-cha por Amelita Vargas, dos canciones por Pedrito Rico y una imitación de Al Jolson por Alfredo Barbieri, que se suceden casi sin interrupción, sirviéndoles de nexo una esquemática anécdota que se resuelve en brevísimas escenas: los números de rock están a cargo de Eddie Pequenino y su ´combo´, Los Caribes, la misma Amelita Vargas, The Rockers y otros intérpretes, en tanto que los bailes – con animada coreografía de Éber Lobato- están a cargo de muy buenos bailarines juveniles de rock, entre ellos Éber y Nélida Lobato, Alberto Anchart (h.) y , entre otros , Delma Ricci. Se advierte que ha sido filmada con presupuesto escaso y se le notan las limitaciones típicas de los films baratos: carencia de escenografía, de composición en las tomas, de conjuntos humanos y, en general, de esmero en la realización. Pero cabe reconocer que, por la sucesión casi ininterrumpida de números de ritmo rápido y de toques cómicos, consigue mantener animación en la hora que dura su proyección. Éber y Nélida Lobato representan posibilidades de un interesante porvenir.

PROGRAMA: Más explosivo que la bomba H, más peligroso que un cohete atómico, así es el rock, el ritmo frenético que hace bailar al mundo. ¡Una dinámica comedia musical, que lo divertirá y hará saltar en su butaca!

Di Sarli

Diario La Razón

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                         Diario Clarín

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Diario La Nación

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                      Diario La Prensa

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Fuentes bibliográficas:

Buscador de Sadaic.org.ar

El músico y coleccionista Zelmar Garín.

El profesional de medios Luis Di Sarli.

Canales de Youtube: Gatosalvaje61 (Carlos Molina),  JuanCarlosDQ, spanishbizarro2, Alexm79, José Chapa.

Video de Jorge Padín subido por Marcelo Moré

Imagen de la tapa del libro de Bitar tomada de: http://www.tematika.com/libros/arte__arquitectura_y_diseno–9/musica–4/pop_y_rock–7/50_anos_de_rock_en_argentina–598340.htm

Ábalos, Ezequiel. 2015. Rock de Acá 1. Edición de autor.

Antonelli, Mario. 2005. Los Gatos Salvajes. 40 años de rock de autor en castellano. Ediciones Catálogos.

Benini, Marcelo. 2 de diciembre de 2016. Johnny Tedesco, el Elvis de Urquiza. Publicado originalmente en el Periódico El Barrio, disponible en: https://periodicoelbarrio.com.ar/si-no-hubiera-nacido-en-estados-unidos-elvis-hubiera-sido-de-villa-urquiza/

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Sin autor. 3 de julio de 2017.   50 años de rock nacional: ¿cuál es la peor película del rock argentino? Disponible en: http://lacosacine.com/hoy-en-la-historia-del-cine/53/50-a%C3%91os-de-rock-nacional:-%C2%BFcual-es-la-peor-pelicula-del-rock-argentino