Casas más casas menos, igualito a mi Santiago

Proverbio argentino

Escribe: Víctor Tapia

Agradecimientos especiales a Sebastián Fernández Coperchio y Fabio Gustavo Medín, quienes posibilitaron este emotivo reportaje

Universo Epígrafe profundiza una veta investigativa que viene urdiendo en lo que va del 2020: la necesidad de ahondar en una perspectiva federal de los orígenes del rock argentino, cubriendo todas las provincias y localidades posibles.

En nuestro canal de Youtube ya hemos subido reportajes a Oscar Camilo Morales (pionero del rock en Misiones) y Ricardo Enrique Greguar (precursor en San Juan) . También hemos contado con una nota exclusiva de Isidro  ‘Jimmy ‘ Fernández, artífice de la primera banda de rock en Salto. Por otro lado, una entrevista a Juan Manuel Medina, vecino de Puerto Madryn, nos reveló el fascinante mundo de las orquestas de las ciudades chubutanas de Trelew, Rawson Puerto Madryn. Lo cual se complementó a la perfección con el testimonio de Jorge Roberto Tascón, baterista de la primera banda rockera de Esquel (sobre la cual se avecinan futuras entrevistas al resto de sus integrantes).

Con anterioridad, también habíamos publicado una excelente nota de José Alfageme sobre los orígenes del género en la Ciudad de Santa Fe. En todos los casos, nos retrotraemos a fines de los 50 y comienzos de los 60 probando que el rock en castellano era moneda de uso corriente en todo el país. La historia oficial del rock argentino no solo plantea un segregacionismo temporal; también tiene un marcado cariz porteñocéntrico, que a lo sumo ha incluido en su acotado canon a algunas personalidades rosarinas. La mayor parte del país yace en sombras totales, produciendo un desconocimiento casi absoluto de la historia del género a lo largo de un territorio bicontinental. 

Hoy contamos con el testimonio exclusivo del guitarrista Hugo Manuel Juárez Montoya, fundador del rock and roll en Santiago del Estero. Un virtuoso de fuste que aún merece un reconocimiento mayor por parte de nuestra lagunera prensa musical. Gracias a las gestiones de Sebastián Fernández Coperchio y Fabio Gustavo Medín pudimos mantener vía mail un grato contacto con él, en el que fuimos despejando distintas dudas sobre su carrera profesional y los primeros pasos del rock santiagueño.

Las andanzas a la hora fabricar instrumentos caseros; grabaciones recuperadas desde el arcón que nos revelan el mundo de la música surf santiagueña; las conexiones con futuras estrellas como Leo Dan Mario Alvárez Quiroga; el baile de rock en la provincia; la relación profesional entre Tanguito / Hugo Juárez; la vinculación con los comienzos del rock patagónico… todo eso (y mucho más ) forma parte del cóctel que nos reveló Juárez con lujo de detalles y haciendo gala de una memoria prodigiosa¡Pasemos a desgustarlo!

250px-Hugo_Juarez_Guitarrista

             Hugo Juárez

 Pago donde nací es la mejor querencia…: la pubertad musical de Hugo

Hugo Manuel Juárez Montoya nació el 13 de agosto de 1943, hijo de Oscar Ramón Juárez (abogado y poeta) y Rosario Montoya (apodada Doña Charito). Por el año 1953, con diez años de edad, aprendió a tocar su primer instrumento: el pinkuyo. Se trató de un regalo personal de un hombre apellidado Pintos, quien dio el instrumento al doctor Juárez pensando que era una quena junto a un manual de aprendizaje de dicho instrumento publicado por él mismo.  El doctor aceptó el presente pero se rehusó a tenerlo gratis y se lo compró a Pintos. 

El joven Hugo quiso aprender a tocar y desechó el método por no lograr comprenderlo. Se dio cuenta que los sonidos graves no sonaban sino se mantenían tapados todos los agujeros de la mano izquierda (sonidos agudos). Ya de chico, el futuro virtuoso hacía gala de un oído muy bueno.  Su padre le prohibió usar el pinkuyo por miedo a que se rompiera los labios, pero Hugo siguió tocando escondido en el fondo de su casa detrás de árboles y plantas. Su hermana Zaida, cinco años mayor a él, lo halló un día in fraganti. Hugo pidió atemorizado que no le contara nada a papá…pero ella le dijo que le gustaba como tocaba y le pidió un tema. Ni lerdo ni perezoso, su hermano le interpretó el bolero Caminemos; famosa composición del mexicano Alfredo Gil, fundador del trío Los Panchos.

Al primero de la familia que le dije fue a mi hermano, trece años mayor que yo, que vino desde Tucumán donde estudiaba abogacía. En un momento de la cena familiar dijo:  Me encontré con la sorpresa de que Hugo toca la quena. Yo para mis adentros dije que me trague la tierra pero mi papá no dijo nada, sobre todo cuando mi hermano Oscar me dijo que tocáramos algo, y así fue mi presentación musical en la familia. A posteriori se hizo el conjunto familiar donde mi madre cantaba y tocaba la armónica y mi hermana Zaida cantaba y tocaba el bombo.

Por 1955, Juárez padre compró esa armónica para su esposa apuntando a la conformación del conjunto familiar. Allí  Hugo tocaba su pinkuyo y su hermano Oscar se encargaba de la guitarra. Nuestro entrevistado pidió prestada la armónica a su mamá con el fin de dominarla.  Con el correr del tiempo le mostró a su hermano Oscar una chacarera que había logrado sacar en el instrumento. Oscar señaló que faltaba una nota, mientras Hugo sostenía que ésta no estaba presente en la armónica. 

Fueron juntos a ver al armoniquista Tito Sotelo, quien le había llegado a ganar un concurso al gran Hugo Díaz y posteriormente grabaría para el sello salteño H Y R el LP Armónica Danzarina (rateyourmusic.com:s/f). Sotelo explicó que Hugo tenía razón: se trataba de una armónica Hohner diatónica, por lo que faltaban notas. Con el tiempo, Juárez pudo adquirir una cromática ayudado por el boom de Hugo Díaz; los vendedores de instrumentos ya tenían un aliciente para traerlas a Santiago. Nuevamente, el joven pionero demostraba las aptitudes de su oído. 

Película argentina de 1956 con una brillante banda sonora a cargo de Hugo Díaz en armónica y Rodrigo Montero en guitarra eléctrica; una de las primeras hechas en el país.

En 1953 Hugo había intentado tocar la guitarra pero le resultaba demasiado grande. En 1955, pudo agarrarla guiado por su madre Rosario y su hermano Oscar. Doña Charito le comentó que su hermano Carlos hacía ejercicios tocando todos los primeros trastes. De ese modo, Hugo aprendió la escala cromática.

Como hemos visto previamente, Oscar Juárez estudiaba abogacía en Tucumán. En uno de sus regresos, recriminó a su hermano por ver que tocaba la guitarra como zurdo. Hugo aprendió todo de vuelta, yendo contra su naturaleza biológica pues él no es diestro. No obstante, él considera que eso le facilitó las cosas debido a las dificultades que posee la mano izquierda al trabajar el diapasón de la guitarra. 

En el año 1959 y ya con quince años, fue a aprender con un profesor que enseñaba en la municipal Casa del Maestro. Allí fue donde empezó a foguearse en la lectura musical. El docente se sorprendió al ver que su alumno tenía una guitarra de concierto, idéntica a una que solo usaban los profesores del lugar. También era igual a tres de las guitarras usadas por el grupo folclórico santiagueño Los Hermanos Simón. La mamá de Hugo le explicó que cuando él no había nacido se la habían comprado a alguien del Consulado Español de Santiago. Con el correr de los años, él se enteraría que se trataba de un trabajo de español Andrés Marín. Las creaciones de este luthier recorrieron América: el formidable guitarrista paraguayo Agustín Pío Barrios usaba otra Marín.

Para ese entonces, Hugo también tocaba el bombo.

Tocar el bombo salió por ver y escuchar los «bombistos» santiagueños que tienen una forma distinta a otros provincianos y particularmente creo que es la más bonita (los que no son santiagueños pretenden imitar este estilo). Recordemos a Domingo Cura, máximo bombista elegido por Ariel Ramírez para la grabación de la Misa Criolla.

Para 1957, Hugo tuvo su primer acercamiento al violín teniendo solo catorce años de edad. Su papá trajo el instrumento bajo el brazo volviendo de su trabajo en los tribunales santiagueños (él se desempeñaba como fiscal del Superior de Justicia). Su deseo era que su hijo lo aprendiera a tocar, ya que lo veía con una facilidad notoria para desempeñarse en cualquier instrumento. Hugo empezó a averiguar la afinación, moviendo los dedos para buscar las notas y agilizarlos. Su meta era tocar alguna chacarera. El violín permitiría en el futuro a Hugo hacer sus primeros pininos en la orquestación, ya que le hizo conocer a la viola y el violoncello.

El adolescente prodigio tenía muchos violinistas cercanos: el gran Juan de Dios Gallo, Don Maguna  y su vecino Don Saavedra. Otro referente era Johnny Ávila, cochero de plaza que llegó a grabar junto a los Hermanos Simón. Conocido de Juárez padre, empezó a parar en la puerta de la casa de Hugo para que éste le acompañara con su guitarra.

Con el violín hago folclore únicamente, porque no me da el tiempo para hacer una práctica permanente de digitación como para tocar cosas mas jodidas. En las grabaciones de tango que estoy haciendo utilizo violines digitales que los toco con el teclado Controlador, el que no tiene sonido propio y lo que uno quiere lo toma de las librerías de sonido.Tan solo hago el efecto percusivo tocando la tercera cuerda del violín detrás del puente, efecto que creo que su inventor fue el gran Fernando Suárez Paz, último violinista de Piazzolla.

Ay, amistad divina, pronto tienes que volver a mí: las andanzas barriales con Leopoldo Dante Tevez

En 1957, Oscar le dijo a su hermano Hugo  que tenía que hacerle un favor. El estudiante de abogacía estaba enamorado de una vecina llamada Chicha, hermana de la modista Juana Tevez. Pero tenía miedo de que al invitarla a casa su padre pensara que se estaba relajando en los estudios. Chicha y Juana tenían un hermano de quince años que estudiaba en la Escuela de Agronomía ubicada en la localidad de El Zanjón. Como él tocaba un poco la guitarra, a Oscar se ocurrió que podía venirse a pasar el rato con Hugo; esto iba a provocar que viniera sí o sí acompañado de Chicha. Zaida Juárez estaba al tanto de la movida e iba a ser cómplice en ella, por lo que solo faltaba el visto bueno de Hugo.

Al otro día se dio con éxito el plan y el chico se presentó como Leopoldo Dante, contando que deseaba recibirse de perito agrónomo. Aclaró que tocaba muy poco la guitarra y se sentía más a gusto cantando. Hugo le alcanzó una guitarra para tocar juntos en Do mayor la zamba Nostalgias Santiagueñas, compuesta por Adolfo Ábalos. Mientras Juárez lo acompañaba con su Andrés Marín, notó que Leopoldo no podía hacer el cambio de Do a Fa mayor. Entonces le dijo al hermano de Chicha que solo cantara. Fue así que Hugo notó que el pibe tenía un lindo timbre de voz y registro alto (años más tarde, sabría que era un registro de tenor con el que llegaba con facilidad a un La ).

Probaron varias canciones y decidieron formar el Dúo Juárez- Tevez. Oscar y Chicha se casaron y tuvieron cuatro hijos. Lo que nadie sospechaba es que Leopoldo sería conocido pocos años después a nivel latinoamericano bajo el pseudónimo de Leo Dan.

 Con el dúo Juárez- Tevez cantábamos en “La Propaladora” , como Luis Landriscina menciona en uno de sus cuentos al sistema de sonido que se utilizaba en los pueblos, que consistía en poner parlantes en las plazas y en partes de la vía pública. Mi familia nos iba a escuchar en la Plaza Independencia, a media cuadra de la casa de mis padres.

También grabamos un simple de 78 rpm en lo de Scilia,un buen locutor que tuvo la emisora local LV11 que tenía un único sistema de grabación en Santiago del Estero. Dicho disco era de pasta virgen con cuerpo de aluminio; mientras comenzamos a grabar Scilia iba sacando con un pincel la viruta del surco que se estaba formando ya con el sonido grabado. Dicho disco tenía una sola cara, no era anverso y reverso. Los llamaban discos de acetato. El “estudio de grabación” o mas bien Espacio de Grabación tenía un solo micrófono para tomar todos los sonidos (Voces y guitarras). 

El tema grabado fue Guitarra Trasnochada, zamba de Arsenio Aguirre. El repertorio era en su mayoría folclore santiagueño. Al poco tiempo dicha grabación se destruyó por el uso porque realmente era muy frágil. 

Cuando nadie tenía un miserable amplificador: los primeros paso de Juárez en la guitarra eléctrica

Se preguntarán como llegó la guitarra eléctrica a la vida de Hugo. Esto sucedió también en 1957. Recordemos que él poseía solo catorce años y dos años de experiencia como guitarrista. Un vecino llamado Hugo ‘ Villa ‘ Villagrán vino a buscar a Oscar Juárez  para pedirle un favor . Pero él no podía complacerlo, y lo llamó a su hermano Hugo. Resulta que Villagrán tocaba la guitarra eléctrica en una orquesta con la cual no podía seguir por un tiempo; le había salido una oportunidad de realizar una gira tocando música folclórica.

Oscar no se sentía preparado ya que sus estudios de abogacía en Tucumán le quitaban tiempo de práctica musical. Hugo preguntó que diferencia había con una guitarra común y Villagrán afirmó que solo cambiaban las cuerdas. Le explicó que con un cable conectado a un amplificador se aumentaba la potencia y fue a su casa para luego volver con todo el bagayo junto. 

La guitarra era criolla lustrada en torno verde oscuro. Poseía cuerdas de metal cuyo sonido era captado por un micrófono ubicado en la boca. ‘ Villa’  la conectó al amplificador de cinco watts y Hugo no podía creer lo que escuchaba. La potencia era mucho mayor a su Andrés Marín y tenía un sonido jazzero bien grave.

Oscar le pidió a Villagrán que le diera la guitarra a su hermano. Hugo interpretó los temas Delicado y Brasilerinho, composiciones del brasileño Waldir Azevedo de las cuales la primera fue popularizada en el país por Oscar Alemán y la segunda sería versionada por varias bandas rockeras como los mendocinos 4 Planetas. Como vemos, los gustos de Hugo demuestran la eclecticidad de consumos musicales existentes en el Santiago de fines de los 50.

Villa dio el visto bueno y dejó a los hermanos Juárez el teléfono del director de la orquesta. Ésta se llamaba Las Estrellas Americanas del Jazz. Incorporaban trompeta, saxo tenor, clarinete, bongó, batería, contrabajo y guitarra eléctrica. El conjunto era liderado por el saxofonista y clarinetista italiano Salvador Cuba, quien también era integrante de la Banda de Policía de Santiago dirigida por Leal Sequeira.

A Hugo lo pasaron a buscar a su casa; él hizo su primera actuación como integrante de una orquesta sin haber ensayado antes. Los músicos pidieron que él se quedara como guitarrista efectivo, deslumbrados por su oído. Pero antes de ello ocurrió una gran anécdota. En la actuación, Juárez quiso levantarse tras la primera presentación para pedir una gaseosa . Uno de los músicos le pidió que se quedara y le insistió en que se la debían traer los integrantes de la orquesta.  Juárez se enteraría años después que ese lugar situado camino a la ciudad de La Banda era el cabaret Petit Monic, donde trabajaban prostitutas. Su padre nunca supo que había tocado en ese recinto.

Con las Estrellas Americanas del Jazz se hacía un variado repertorio: algo de jazz, cha cha chá, mambo y algo tropical… No hay grabaciones porque en ese entonces (año 1957) no había nada para hacerlo en Santiago del Estero. 

Tras cinco/seis meses le prestaron a Hugo una guitarra de mejor apariencia (lustrada de negro, con caja jazzera) pero de menor sonido; poseía un micrófono de baja impedancia. En 1958, compró una guitarra argentina Palm acústica hecha por el luthier Pedro Malosetti (hermano de Walter, tío de Javier) . Ésta poseía un diapasón de ébano Juárez se encargó de ponerle un micrófono; se la había comprado a Aníbal Paz, contrabajista que habría de formar con él algo muy importante...

El 58 fue también el año en que Hugo se mandó a hacer su primera guitarra eléctrica diseñada por él mismo. 

La hizo un luthier santiagueño. Sin haber visto nunca una Gibson Les Paul diseñé la misma forma. Les Paul la hizo alrededor de 1952. La mía fue en 1958. Le puse un mic Morgan (argentino). Una picardía mia: como en ese entonces había encordados gruesos como para guitarras de jazz, yo utilizaba 1ª, otra 1ª (como segunda cuerda), 2ª, 3ª, 4º, y 5ª para totalizar las seis cuerdas. Cuando ya estaba radicado en el sur recién llegaron los encordados 08,09,010 y mas. En ese momento comencé a utilizar las cuerdas 09 en Strato y Les Paul;  y 012 en guitarra de jazz para lograr el sonido clásico.

Esta guitarra poseía media caja y era muy liviana.  Su diapasón era de itín, una madera más dura que el ébano. Hugo pidió emplear este material porque ya había sido usado por Paz en un diapasón que le hizo para su guitarra anterior. En cuanto al micrófono Morgan, fue comprado en Buenos Aires por una tía de Hugo ya que no se vendían en Santiago. Ya estaban dadas todas las condiciones técnicas necesarias para el estallido del rock and roll santiagueño.

GUitarra de itin (1)

Hugo Juárez y su guitarra eléctrica con diapasón de itín

En 1958, Hugo también compró su primer amplificador. Se lo vendió el guitarrista Mario Fioramonti, quien también le mostró a Juárez la primera guitarra de sonido agudo que él vio en su vida: hecha por el luthier brasileño Angelo Del Vecchio, tenía un sonido parecido a las Fender Strato o la Gibson Les Paul. Era similar a la que usaba Luis Aguilé.

                  Video que muestra tocando a Mario Fioramonti

El amplificador era valvular y poseía quince watts.  En el futuro Hugo le cambiaría su parlante de diez pulgadas por uno de doce,  para levantar la calidad y potencia.  Su amigo Leo Dan lo acompañó a buscarlo y el revuelo generado por este accesorio generaría la electrificación de otro músico santiagueño: Julio Cárdenas. 

Entre Leo y yo cruzamos diagonalmente la Plaza Independencia de Santiago del Estero, que separaba la casa de Fioramonti y la mía, con el ampli en nuestras manos. Ese día estuvimos tocando hasta las dos de la mañana. Recuerdo que mi padre cuando castañaba con sus dedos era porque le gustaba lo que miraba o escuchaba.
Este amplificador me inspiró para comenzar a hacer el estilo de conjunto para música bailable. A Julio Cárdenas, amigo inseparable de aventuras guitarrísticas, lo insté para que se comprara también una guitarra. Julio lo hizo y además se mandó a hacer un ampli.

MF1 (1)

Foto de Mario Fioramonti tocando en el Club de Regatas de Rosario, año 1956. Se lo ve con la guitarra hecha por el luthier brasileño Angelo Del Vecchio.

Pero el ampli de Cárdenas casi le quita la vida a Juárez, quien todavía no había fundado la primera banda de rock santiagueña. Precisamente, fue Leo Dan quien le salvó de la muerte. La experiencia fue muy fuerte para Hugo, quien estuvo a segundos de irse de este mundo. Una muestra notoria de los riesgos a los que debían exponerse los pioneros.

El amplificador de Julio Cárdenas tenía un sistema de enchufar a la corriente eléctrica, cuyo cable tenía el mismo sistema para ser conectado al ampli, desde ya peligrosísimo por ser idénticos ambos enchufes.
Recuerdo vívidamente ese día del suceso que estoy narrando, con características muy fuertes para mi. Julio Cárdenas vendría a casa para comenzar a ensayar «la nueva música» con guitarras eléctricas.Su guitarra y su ampli estaban en casa. También ya estaba «el Dante» (todavía no era  ‘ Leo Dan ‘ ).
Tenía una habitación que convertí en «sala de ensayo», en realidad una sala de estar (living) donde estaban el piano, las guitarras y los amplificadores. Se me ocurrió ir a dicha sala y veo que el ampli de Julio tenía el cable de enchufe tirado en el piso.
Yo lo levanté con el propósito de conectarlo a la corriente eléctrica. En ese momento sentí un terrible sacudón en mi cuerpo. ¿Que carajo pasa? fue mi primer pensamiento y veo el cable que se me había pegado en la palma de mi mano derecha. Intento sacarlo sin lograrlo con mi mano izquierda y como siento que me estaba quedando sin fuerzas, camino trastabillando hasta la puerta que daba al patio y pegué un grito de auxilio…¡Mamá! Por suerte Leo estaba con ella, vio el cable pegado en mi mano y en un reflejo instantáneo comenzó a correr velozmente hacia mi. Fue una veloz carrera de diez metros. Leo llegó hacia mi y se tiró con todo su cuerpo para despegarme del cable. Fue una acción tan rápida que cuando llega mi madre, también corriendo, yo ya estaba sin el cable.
Con una sonrisa le digo a mi madre:-No pasa nada, mamá-,y mi madre me dijo:-Hijo, tenés un semblante pálido y todo morado alrededor de tu boca-. Era el comienzo de la muerte.
Sin duda, Leo Dan me salvó la vida.

La relación entre Cárdenas Juárez se afianzaba paso a paso, suscitando colaboraciones artísticas en las que tocaban tanto folclore y tango como jazz música estadounidense variada. 

Con Julio Cárdenas, amigo y guitarrista ladero convivimos el mundo de la guitarra, en la música nativa (Troveros del Salitral); haciendo tangos (Grela, Adolfo Berón, Martin Torres); jazz (entre nosotros y con Mario Fioramonti). Al yo tener guitarra eléctrica y ampli propios lo entusiasmé y Julio Cárdenas consiguió lo suyo. Con las guitarras eléctricas comenzamos a jazzear con temas de Oscar Alemán (Susurrando, Rosa Madreselva, Abril en Portugal, etc);  y lo que además hacíamos con Mario Fioramonti (Lover de Les Paul , Indian Love Call de Friml-Stothart y otros),  o sea con tres guitarras.

   Hugo menciona aquí a Los Troveros del Salitral; éste fue un grupo folclórico compartido con Cárdenas, Leo Dan y otros músicos entre los que se contaba Gustavo Chazarreta. Éste último sería más conocido por su labor como basquetbolista. 

Trov del salitr

                                 Los Troveros del Salitral

El nombre lo puso mi madre. Primero fue un trío constituido por Leopoldo Dante Tevez en bombo y primera voz; Mario Juárez en guitarra rítmica y segunda voz; y yo como tercera voz, primera guitarra y arreglador.

Invité a Julio Cárdenas para formar el cuarteto. Cárdenas sería cuarta voz y segunda guitarra. Teníamos el estilo mendocino donde “puntean” dos guitarras (Intro y adornos) y una de rasguido. En un momento invitamos al glorioso basquetbolista y médico cirujano Gustavo Chazarreta. Fue una formación sensacional porque a la tesitura vocal ya la catalogamos musicalmente de la siguiente forma: Dante Tevez, 1er tenor; Mario Juárez, 2º tenor; Hugo Juárez, 1er barítono; Julio Cárdenas, 2º barítono; y Gustavo Chazarreta barítono/bajo. A la instrumentación también le dimos un estilo mendocino , o sea que teníamos dos guitarras de punteo,una guitarra rítmica ,un guitarrón y un bombo criollo.

El estilo puntano de tocar la guitarra,sobre todo los dúos con dos guitarras punteando, me vino por escuchar temas de Los trovadores de Cuyo (donde estaba el tremendo guitarrista Tito Francia); Antonio Tormo; y los Tres para el Folklore donde estaba Luis Amaya, otro grande de la guitarra.

El repertorio era también en su mayoría santiagueño , por ejemplo la zamba Hija del Sol del Doctor Mario Navarro; la zamba Huella de Julio Argentino Gerez (poco conocida); y Zamba de La Toldería de Portal y Valles; El 180, gato de Andrés Chazarreta en forma instrumental; y también Danza Paraguaya de Agustin Barrios.

No hubo grabaciones con este conjunto.

troveros (1)

                            Los Troveros del Salitral, año 1960

A mediados de 1958, Hugo Julio decidieron sumar percusión para la música que hacían en sus duetos guitarreros y eléctricos.  Fue así que contactaron al baterista español Roberto Dougnac, quien luego sería uno de los integrantes de la primera banda de rock santiagueña. 

Decidimos acoplar a nuestras guitarras un acompañamiento percusivo. Realmente no recuerdo como fue el contacto con Roberto Dougnac, con catorce años de edad, quien mostraba tener condiciones rítmicas pero no tenía batería. Como trío fuimos a tocar a un lugar con una pandereta como redoblante y un miserable platillo.

Criminal tango (¿o mambo?): la visita de Billy Cafaro a Santiago del Estero

Por el año 1959, Hugo tenía dicieseis años de edad y dos años de antiguedad en la guitarra eléctrica. Fue en ese momento que tuvo la chance de acompañar a Billy Cafaro en su visita a Santiago. El rock argentino estaba en una etapa marcada por el predominio de artistas como Paul Anka y Neil Sedaka. Billy encarnaba a la perfección este estilo que había sucedido al rock and roll furioso clásico.

En Santiago había pocos guitarristas eléctricos: aparte de Hugo y Villagrán se encontraban Mario FIoramonti  y ´ Chinchy ‘ García.  Juárez era el único interesado de ellos en acompañar a Billy. 

Cafaro vino sin partituras ni grupo de acompañamiento. Hugo tocó con él sin ensayo alguno, debido a que conocía todas las grabaciones de Billy. Con solo los títulos de los temas y saber la tonalidad de ellos ya podía tocarlos en vivo sin drama. Para el show usó su guitarra eléctrica propia y su amplificador comprado a Fioramonti . El grupo se completaba con un baterista muy flaco apodado ‘Muerte’. Él tenía una batería de tres cuerpos , un hit hat bastante modesto y un plato muy humilde.  La backing band no incorporaba ni contrabajo ni instrumentos de viento. Pese a las limitaciones de recursos y personal, el efímero trío pudo tocar todos los temas a tempo.

A Billy lo acompañé las dos veces que anduvo por Santiago. Es muy posible que haya tenido una tercera aparición por suelo santiagueño pero no sé quiénes lo acompañaron. No comprendo porqué siempre fue a Santiago del Estero sin grupo de acompañamiento.

Reyes criollos: los Kings Rockers, o la primera banda de la historia del rock and roll santiagueño

Este contacto con el rock lento de Billy fue la antesala de la fundación del rock and roll santiagueño. En el mismo año de 1959, Hugo ya escuchaba toda la música proveniente de Estados Unidos. Le gustaba Elvis Presley por la fuerza de su música y la guitarra eléctrica jazzera que lo acompañaba.

Por mi formación jazzera me gustaba mucho el sonido de los guitarristas de Presley  ( Scotty Moore y James Burton); y Franny Breecher. guitarrista de Bill Haley. Presley y Haley me abrieron la atención para el rock, sobre todo por la forma de tocar de esos guitarristas que indudablemente tienen un origen jazzero. También escuchaba a Little Richard.

El rock and roll me atrajo porque sentía que a todos los jóvenes les gustaba, y musicalmente por la participación de la guitarra como instrumento principal del mismo.Vale acotar que por mi sentido/espíritu jazzero lo encontraba muy fácil de tocar. 

También se estrenaban las películas de rock and roll en los cines santiagueños y fenómenos como el de la subcultura petitera daban sus coletazos. El baile hacía furor y sus difíciles destrezas suscitaban cambios estéticos. 

Había tres cines: el Petit (mas caro), el Luxor (más barato) y el Renzi. Bill Haley y Presley se vieron en el cine Petit. Era un espectáculo atractivo pero no desbordante. Los santiagueños siempre prefirieron bailarlo al rock. Recuerdo un muchacho (no recuerdo el nombre) que le decían El Petitero porque usaba unos pantalones muy ajustados con zapatos de suela ancha que imagino era de goma; indudablemente le eran favorables para las acrobacias que hacía en su baile rockandrollero. 

Pero los pasos para que Santiago del Estero desarrollara su rock and roll propio iban a ser graduales, si bien se dieron en el marco de apenas dos años.  La progresividad del proceso se dio porque al igual que en el resto del país, las estructuras musicales del pasado daban paso a la música del futuro.

Y así como las orquestas de jazz gestaban al rock y pop en las otras provincias, no podían dejar de cumplir un rol en esta historia las santiagueñas Estrellas Americanas del Jazz.  Al igual que lo sucedido en Buenos Aires entre la orquesta de Lalo Schifrin y un joven rockero de barrio como Jorge ‘Jerry ‘ Mario Rodríguez, se establecía una dialéctica por la cual los jazzeros no bloqueaban el paso a las nuevas generaciones. Antes que fuera el momento del predominio de las bandas de barrio, los exponentes juveniles de las nuevas músicas se integraban a las orquestas en calidad de crooners o incluso músicos instrumentistas.

72730741_3107298312617100_3026236134310019072_o

Jorge ‘ Jerry ‘ Mario Rodríguez cantando rock and roll con la orquesta de Barry Moral, año 

1953. Jerry nació en 1935, Barry en 1910. Un ejemplo de la dialéctica existente en los

orígenes de nuestro rock. 

Ya había un adolescente reclutado entre las filas de Las Estrellas Americanas del Jazz: el mismísimo Hugo Juárez. Y él hizo las gestiones para que dos amigos suyos hicieran su ingreso: Leo Dan y Julio Cárdenas. Esto permitió ampliar el repertorio de la orquesta y consolidar su electrificación.  Pero no hubiera sido posible sin la venia de Salvador Cuba, el director de la orquesta que vio con buenos ojos este aggiornamiento. No importa si fue por convicción propia o necesidad de adaptarse al mercado: la actitud de apertura de los jazzeros argentinos hacia los jóvenes ha sido destacada por el mismo Pajarito Zaguri y es ejemplo para un presente en los que se cuidan tantas quintas baratas horadando la necesaria refundación  del rock local.

Estaba la orquesta de Salvador Cuba actuando en la confitería El Molino, que anteriormente allí funcionaba el cine Luxor, un lugar bastante amplio con un cómodo escenario. Yo por supuesto estaba como guitarrista de la misma, ya con guitarra y ampli propios.

Se desarrollaba el espectáculo cuando de pronto veo a mi hermano Oscar entrar con toda su familia, Chicha Tevez su esposa, Leo Dan y Zaida, la primera hija del matrimonio Juárez-Tevez.

En el descanso fui a la mesa de ellos y conversando con  Leo le dije si no quería cantar algo con la orquesta y me dijo que sí. Cuba ya me tenía una consideración especial por mi capacidad musical y sobre todo porque veía el avance musical de la guitarra eléctrica. Cuando le dije si permitía que Leo cantara me dice: – Pero no hay arreglos para que ése muchacho cante con la orquesta- y yo le dije que sería suficiente que el baterista tocara conmigo para acompañar a Leo; Cuba dijo que sí.

Hacíamos la segunda presentación de la orquesta y en la mitad se hace la invitación para que Leo cantara.

Leo, Cárdenas y Juárez ya venían tocando juntos temas modernos fuera de lo que eran Los Troveros del Salitral. Según los recuerdos de Hugo sobre el repertorio que cantaba Leo, es probable que el tema que entonó en su debut con Las Estrellas Americanas del Jazz haya sido Only You: clásico de repertorio de The Platters. Claro, existía una versión en castellano: la de Los Cinco Latinos, grupo clave para mostrar que el doo wop y otras músicas estadounidenses podían cantarse en nuestro idioma. Por algo las primeras grabaciones que hizo Nebbia en su vida utilizaron tres versiones hechas por el grupo de Estela Raval. 

Hugo recuerda otros temas modernos que cantaba Leo en sus orígenes. Sin certeza absoluta, consideramos a Only You como el candidato más probable teniendo en cuenta las fechas. Dan también cantaba en sus comienzos el bolero Calla compuesto por Viviana Cadel; Leo lo había escuchado a Pedro Santacruz antes que fuera grabado por los uruguayos Iracundos. No logramos hallar fechas de grabación de esta versión; discusiones aparte, lo cierto es que Leo generó ovación , griterío y aplausos. 

Nadie en Santiago del Estero cantaba temas modernos (ahora me doy cuenta que no había nadie para acompañarlos). Inmediatamente Cuba le hizo la oferta para que Leo fuera cantante de las Estrellas Americanas del Jazz y él aceptó. Mi pensamiento era que si Leo y yo estábamos en el conjunto podría ofrecerle también a Julio Cárdenas como guitarra eléctrica rítmica y Cuba aceptó (lo reitero: Cuba presentía que se venía el tiempo de la guitarra eléctrica). Al yo dejar la orquesta porque salió una contratación en el casino de Termas del Río Hondo donde había que tocar seis días en la semana y se regresaba muy tarde, pensé que no iba a poder cumplir con mis obligaciones estudiantiles (mmm…. pensé en mi padre) pero Leo y Julio aceptaron (además era muy buena guita).

En noviembre de 1959 Hugo ya no tocaba con Las Estrellas Americanas del Jazz y se estaba juntando a tocar con el baterista Roberto Dougnac y el contrabajista Aníbal Paz. Éste usaba el contrabajo de su padre, integrante de una orquesta de tango. Empezaron tocando instrumentales, hasta que Hugo decidió poner un cantante. Probaron varios y quedó elegido Chiche Alex Santillán, quien en palabras de Hugo era un muchacho con una gran simpatía y de voz quebrada como la de Joe Cocker.

Es así que empezaron a tocar temas como Pity Pity compuesto por Joseph Ergas Steve Lawrence para Paul Anka; y Personalitde Lloyd Price Harold Logan. En ambos cosas tomaban las versiones en castellano hechas por Billy Cafaro; de hecho, éstas eran las referencias para que ellos hicieran sus propios arreglos.  El problema es que les faltaba el acceso a referencias en castellano de rock and roll.  Cafaro tuvo un rol importantísimo mostrándoles que se podía cantar en la lengua de Cervantes algunos de los temas no tan acelerados de la nueva música estadounidense.  También cumplió su papel la adaptación rockera que hizo Ritchie Valens de la tradicional canción mexicana La Bamba, la cual también fue tocada por los precursores santiagueños.  Pero faltaba una manera de trasladar a nuestra lengua los furibundos temas de Elvis, Haley y Little Richard. El grupo se negaba a cantar en inglés.

Escuchábamos el rock de Presley, Bill Haley y Little Richard pero no se podía cantar. Algunas versiones instrumentales de los mencionados las hice, con el Guitar Boogie de Arthur Smith al frente como caballo de batalla. Hablábamos del Rock and Roll Made in USA pero nos conformábamos con el Pity Pity  y otros.

Un día cayó a las manos de Hugo un disco de los mexicanos Teen Tops. Ya estamos en 1960, ya que el primer disco de este grupo fue grabado en mayo de ese año. A Hugo le dieron ganas de organizar un grupo similar: él tenía un amplificador de sonido similar al empleado por los hombres de Enrique Guzmán. Y además, ya tenía una prueba concreta de que se podía rocanrolear en castellano sin ningún problema.

Los Teen Tops fueron los que me entusiasmaron , por hacer el repertorio que ellos mostraban en entendible castellano.

A pesar de que cuando comenzaron los ensayos en noviembre de 1959 el conjunto no tenía nombre , los mismos integrantes en el año 1960 se denominaron Kings Rockers cuando comienzan las actuaciones y agregando el repertorio de Teen Tops en castellano.

Todos eran jóvenes en 1960: Hugo tenía diecisiete años, Dougnac quince, Chiche Alex dieciocho y Paz diecinueve. Ninguno llegaba a tener veinte pirulos. Las presentaciones en vivo daban fe de esta jovialidad:  Aníbal se ponía a bailar con el contrabajo , al igual que lo hacían Marshall Lyttle y Al Rex en los Comets de Bill Haley. Hugo se tiraba al piso o hacía destrezas tocando la guitarra solo con su mano izquierda. En cuanto al cantante Chiche, éste era dueño de una voz ronca . En palabras de Hugo: A mí me gustaba mucho porque le metía toda la polenta a los temas.    

 Era impresionante la aceptación de la juventud por este tipo de música y nosotros éramos los únicos que la hacían.Los bailarines de rock and roll mostraban un desarrollo gimnástico impresionante que los demás géneros musicales no lo tenían.

Un muchacho joven, Nacho Araujo, vio algunos de los ensayos de los Kings Rockers y luego se convirtió en representante del grupo. Araujo comenzaba así una larga carrera en el medio, que incluiría la animación de bailes con sus discos. 

También tocábamos instrumentales como Jinetes en el Cielo  que lo hacía el guitarrista Al Caiola y Rock del Río Rojo que lo hacían los Teen Tops [Nota 1 al pie del editor ]; mi ampli tenía el sonido de trémolo/vibrato que era característico en esos temas. Composiciones propias para los Kings Rockers no hice porque la gente quería escuchar temas ya grabados y difundidos. Una grabación inédita no les hubiera interesado.

Como ninguno de nosotros sabía inglés, no nos atrajo la cuestión de hacerlos con fonética. Los Kings Rockers nunca grabaron.  

Las complicaciones residían en el apartado técnico: las cuerdas de tripa del contrabajo de Paz restaban potencia, sumado a que los sonidistas no tenían forma de amplificar un sonido tan grave. El sonido de amplificación general de la época no pasaba de los 30 watts  y los micrófonos solían ser de mala calidad,  salvo si aparecía un milagroso Shure. Por si fuera poco, el redoblante con parches de cuero y el platillo usados por Dougnac como batería ni siquiera le pertenecían: eran prestados. 

Kings Rockers debe haber durado tres meses porque musicalmente me incomodaba que el contrabajo sonara muy poco (esa época tenían cuerdas de tripa) y la batería era un redo con parches de cuero y un deprimente platillo.

Hugo decidió armar un conjunto de cambio: Robert y Sus Rockers, con la peculiaridad de que ahora Dougnac cantaba al mismo tiempo que tocaba la batería. Si bien no poseían contrabajo, ganaban potencia debido a que Roberto consiguió una batería completa. Además, habían incorporado una guitarra rítmica.

Sobre el grupo original hice cambios para mejorar el sonido/estilo general, Organicé Robert y su Rockers: Dougnac cantando y tocando una batería completa que no sé de dónde la sacó; y Alex Casé en guitarra (él le había comprado a Julio Cárdenas su primera guitarra eléctrica). El sonido tenía más fuerza pero no me convencía.

Hugo tenía la mira puesta en incluir a Julio Cárdenas debido a sus dotes crecientes en la guitarra eléctrica. Por eso decidió hacer una nueva formación de los Kings Rockers, la cual desafortunadamente no llegó a tocar en vivo.

Decido hacer un nuevo Kings Rockers con Johnny Delara en canto; Mario Hugo Bustamante (catorce años) con una bata mejor que la de Dougnac; Julio Cárdenas con su nueva guitarra eléctrica, una Morgan Stratocaster; y Aníbal Paz en contrabajo.

king rockers con primera viola

Los Kings Rockers en su última formación, año 1960 

De la formación original de los Kings Rockers, han fallecido Aníbal Paz, Chiche Alex Santillán y Roberto Dougnac. Sin dudas, el primer grupo de la historia del rock and roll santiagueño; enorme vergüenza que los historiadores del género no lo hayan mencionado jamás.

El infierno está encantador esta noche: los Demonios del Ritmo y el primer bajo eléctrico santiagueño

Hugo crearía luego la banda Los Demonios del Ritmo (¡menudo nombre!) junto a dos compañeros de Los Troveros del Salitral: Julio Cárdenas y el mismísimo Leo Dan. Habíamos dicho que este último cantaba ya Only You usando la versión de Los Cinco Latinos. Para el 61 agregó dos canciones más a su repertorio: Cuando Calienta el Sol (lanzada originalmente en ese año por el trío cubano radicado en México Los Hermanos Rigual; grabada por rockeros argentinos como Tony Vilar); y La Novia del chileno Antonio Prieto (también lanzada en 1961).

Si bien hoy concebimos a estos dos últimos temas como alejados del rock, cabe repasar las etiquetas de discos de la época para ver cómo este tipo de músicas eran catalogadas bajo el mote de rock lento. La confusión (si es que así puede llamarse) era internacional, pues La Novia de Prieto había sido lanzado en Francia dentro de un disco titulado… Rock lento mexicano (discogs; s/f). Todas las músicas modernas entraban bajo el paraguas del rock. Podríamos juzgar a la época con los ojos de hoy; también podríamos reflexionar por qué hoy consideramos a baladas como Presente, Té Para Tres, El Rey Lloró , Muchacha Ojos de Papel Canción para mi muerte como rock nacional. ¿No podrían ser catalogadas como rock lento? Los géneros son meras etiquetas sociales cuyos significados van cambiando con los tiempos. 

R-3395120-1328727226.jpeg

Los Demonios del Ritmo también incorporarían temas de rockeros locales como Los Pick Ups Jackie y los Ciclones. 

El intento de hacer una nueva versión de Kings Rockers no resultó porque se me vino la idea de hacer un repertorio más amplio; no únicamente de Rock and Roll como lo hacían los Kings Rockers. Y por ese motivo aparecen los Demonios del Ritmo.

En los Demonios del Ritmo no hubo ningún integrante de los Kings Rockers. Su primera formación estaba compuesta por Julio Cárdenas en segunda guitarra; Cacho Bobes en piano; Mario Hugo Bustamante en batería; Sigfrido Joaquín Kaempfert (alias JImmy Ken, yo le puse ese pseudónimo) en bongó, Leopoldo Dante Tevez ya con el seudónimo de Leo Dan; y yo en arreglos y primera guitarra.

No cantamos nunca en inglés, ni siquiera en fonética. Coincidente con la costumbre de ese entonces de tener únicamente covers en el repertorio, los primeros integrantes de los Demonios del Ritmo no querían hacer los temas propios de Leo Dan.

Al estilo Presley o Bill Haley, Leo tocaba con una guitarrita criolla pintada de rojo que era para hacer facha solamente porque era sin micrófono como tienen las guitarras acústicas en la actualidad. 

demonios con leo dan

Los Demonios del Ritmo, año 1962. Leo Dan es el segundo a la izquierda

En el año 1962 Hugo decidió crear un instrumento necesario en la nueva etapa histórica del rock. En 1960 había visto en la tapa del primer LP de los Teen Tops al bajo eléctrico que usaba el grupo mexicano. Le había llamado la atención al escuchar el disco que había algo que sonaba como un contrabajo pero con característica similares a la guitarra eléctrica; como si se tocaran solo las cuerdas graves.  En ninguna casa de instrumentos de Santiago se vendía algo similar. Pero Juárez deseaba que Los Demonios del Ritmo tuvieran algo igual.

Siempre visitaba al luthier don Gregorio Paz y veía su forma de trabajar en la hechura de sus instrumentos, como preparaba la cola para un muy buen pegado de la madera. Para la parte “eléctrica” me había conseguido un libro donde bien se explicaba el armado de los micrófonos de guitarra eléctrica con los elementos a utilizarse, tipo de alambre de bobina, imanes, conexión de ellos a los controles de volumen y tono. Todos estos conocimientos los apliqué para hacer el primer bajo santiagueño.

37820917

Juárez no tenía como obtener las medidas del diapasón del bajo, más largo que el de la guitarra eléctrica. Por eso lo hizo con las medidas del diapasón de guitarra, al igual que se haría en el futuro con el bajo argentino Sinfonía.  Hugo también pensó que debía conseguir alguien que lo toque; un artista que tuviera idea del trabajo musical del bajo.

Para 1962 ya había otra banda de rock en Santiago: Los Valiant. Hugo vio que allí hacía de las suyas un músico llamado Aldo Nerio Cortés Luna, quien se desplazaba como bajista en su guitarra de sonido mas bien grave. El día que Los Demonios del Ritmo y Los Valiant tocaron juntos, Juaŕez le propuso que le ayudara a armar el bajo para luego sumarse de manera efectiva a su grupo. 

Cortés Luna empezó a ir a la casa de Hugo todos los días. Se encargaba de todo lo referente a la madera, mientras Juárez hacía la bobina del micrófono. En su taller armado en casa tenía varias herramientas, incluyendo una bobinadora a pedal. Hugo estaba al tanto de que una bobina de pocas vueltas daba baja impedancia, otorgando así un sonido claro y sin ruidos pero de baja potencia. La baja impedancia quedaba descartada, solo podía funcionar con un amplificador especial (como los de Phantom Power).

Trabajaron entre ocho y diez mil vueltas en busca de un sonido potente. Terminado el instrumento, fue enviado a nacarar por completo. Luego colocaron el micrófono con potes de volumen y tono. Pero no había cuerdas de bajo a la venta en Santiago. Hugo puso dos cuerdas quintas como primera y segunda; y una sexta cuerda como tercera de bajo. Eran todas de guitarra, pero gruesas al estar concebidas para jazzeros.

Faltaba la cuarta cuerda del bajo. Hugo le pidió a Almada Cárdenas, técnico reparador de pianos y guitarrista, que le entorchara una cuerda dándole el grosor necesario. Almada no le cobró nada por su labor.

Fui volando a casa para colocar esta cuerda y probar el bajo. ¡Era sensacional como funcionaba!.

primer bajo santiagueño y guitarra palm con diapason de ebano 1959

En esta foto, se puede ver al primer bajo eléctrico santiagueño.

Hugo sostiene su guitarra Palm de 1959 hecha con diapasón de

ébano, hecha por Pedro Malosetti. 

Aldo quedó incorporado a Los Demonios del Ritmo, convirtiéndose en el primer bajista eléctrico santiagueño. A nivel país, tenía pocos antecedentes; es el caso de Toto Pomar, engranaje fundamental de la banda de Johnny Tedesco y referente ineludible de nuestro jazz.  Él también tuvo que hacerse su propio bajo, situación que se repitió con la primera banda de rock sanjuaninaRicardo Greguar y su orquesta, luego conocida como The Juglars.

La presentación del primer bajo santiagueño fue anunciada con suma antelación. Casi todos los músicos de los nuevos conjuntos santiagueños fueron a ver que era esa furia. Asombrados por el sonido, cuando terminó el show querían saber como había sido hecho el instrumento. De manera generosa, Hugo los invitó al taller para mostrarles la cocina del asunto. La intriga de los rockeros santiagueños residía en donde se podían conseguir los imanes para el micrófono. Juárez explicó que si bien se los habían regalado, no eran nada extravagante: todos los teléfonos los poseían. Quince día después, la prensa local informaba: Inadaptados sociales cometieron actos vandálicos robándose todos los teléfonos públicos . ¡Los rockeros santiagueños habían ido en masa a las calles en busca de insumos para sus propios bajos!

Pero…. ¿cómo fue el final de esta primera formación de Los Demonios del Ritmo?

En un momento donde nació la idea de ir a Buenos Aires el que dijo que no podía ir era el pianista Bobes. Entonces aparece Yayo Cartier, un músico que había acompañado un tiempo al armoniquista Hugo Díaz en Buenos Aires y también tocaba un poco el piano. En ninguno de los instrumentos era un músico sobresaliente, no sabía leer música pero se las rebuscaba para cumplir. Yo lo hablé para ocupar el lugar de Bobes y aceptó. Habrán pasado tal vez dos meses de Cartier suplantando a Bobes cuando un día éste se me apareció y me dice: – Veo que el conjunto no se va a Buenos Aires por lo tanto quisiera recuperar mi puesto -, y le contesté que no era posible.

Esto fue la causa de la ruptura con los demás músicos. El diálogo con Leo Dan siguió por la parentela entre ambos, él y yo, en primer lugar y también con Julio Cárdenas con quién hice una gran amistad a través de la guitarra.

Escuché un anuncio por la emisora local de una actuación de los Demonios del Ritmo que yo no estaba informado y no recuerdo si fue Leo Dan o Julio Cárdenas quien me dijo que el representante Carlos Buitrago aseguraba que yo no participaba. Yo no hice “quilombo” en ese momento. A principios de la semana siguiente a esa actuación fui al Sindicato de Músicos de Santiago del Estero y como yo había registrado a mi nombre “Los Demonios del Ritmo”, el Sindicato lo llamó a Buitrago diciéndole que se abstenga de utilizar dicho nombre. De esta forma Buitrago creó “Los Demonios” con Leo Dan; Julio Cárdenas de primera guitarra; Yayo Cartier de segunda guitarra; Cacho Bobes al piano; Mario Hugo Bustamante en bata; y Jimmy Ken en bongó.

Creo que Los Demonios tuvieron una actuación mas y Leo Dan desapareció, nadie sabía donde estaba. A la semana siguiente de ese contrato que no participé, rearmé los Demonios del Ritmo. Roberto Dougnac en batería, Alex Casé en guitarra rítmica y Johnny Delara en voz cantante (Johnny Delara era rockero, Leo Dan no lo era). Posteriormente Rubén Catán reemplaza a Alex Casé en guitarra e ingresa Pety Marquez al piano. Los Demonios estuvieron prácticamente dos o tres meses sin trabajar. Habrán pasado casi cinco o seis meses de la desaparición de Leo Dan, cuando un día lo vi en casa de mi hermano (marido de la hermana de él) y estuvimos conversando un poco. Allí me contó que había grabado en CBS pero que el primer disco simple no saldría editado porque como en ese entonces era menor de edad vino a buscar la autorización de su padre, papel que se lo hizo mi hermano por el hecho de ser abogado.

El santiagueño Johnny Delara tenía una muy buena voz que se prestaba para cantar todo tipo de repertorio de cantantes o conjuntos de la época, sobre todo sin llegar a imitarlos (cantar con una voz parecida al original). Lo hacía con espectacular acierto personal, atributo que le valía la simpatía del gran público que asistía a los clubes bailables. Johnny cantaba el repertorio de los Teen Tops mexicanos o los argentinos Pick Ups con la gran voz de Horacio Ascheri; pero también a Johnny Tedesco  y el italiano Doménico Modugno, por mencionar algunos.

Johnny Delara, cuando le hice la propuesta para tenerlo como integrante de los Demonios del Ritmo estaba en Los Rocklands, muy buen conjunto santiagueño cuyo director era el ‘Rafa’ Ledesma, con quien éramos rivales musicalmente pero muy buenos amigos. ‘ Rafa ‘  Ledesma, en una conversación telefónica que tuvimos, me dijo: -Cuando vos me «afanaste» al Johnny para reemplazarlo a Leo Dan, tuve que cubrir su lugar con Mario Alvarez Quiroga (nada menos)-, a lo que yo le contesto:-¿Y porqué no me acuerdo de que Mario haya estado en Los Rocklands?-.Y Rafa termina diciendo:-Porque él actuaba en ese entonces con el seudónimo ‘ Nardo San Remo ‘ -.

Nótese como nombres que no identificamos a prima facie con el rock jugaron su rol en los orígenes mismos del género en Santiago: nos referimos a Leo Dan y Mario Alvárez Quiroga. Por otro lado, ya Hugo apreciaba como cantantes de la talla de Delara mostraban aptitudes especiales para el rock and roll que otros no poseían.

año 62 los demonios con dellara

Los Demonios del Ritmo, año 1962. El cantante Johnny Dellara, sentado en el piso

Aldo-los Dem del Rit

    Última formación de Los Demonios del Ritmo anterior a la que viajó a Buenos Aires

Surf City…. of Santiago del Estero: el maravilloso simple surfero de Los Demonios del Ritmo

Por el año 1962, un músico porteño vio tocar en Santiago Los Demonios del Ritmo en su nueva encarnación, tocando en el hoy inexistente Parque de Grandes Espectáculos (ubicado dentro del Parque Aguirre).

En una actuación que compartimos con Julio César (Palacios), su representante Alberto Losavio (más conocido en el ambiente con su seudónimo Tine) me miraba y escuchaba tocar la guitarra. Cuando bajé del escenario me dijo que si se me ocurría ir a Buenos Aires , él tenía interés en que grabara para él en su sello Juniors. En el año 1963 mi hermano me dice que si seguía estando en Santiago del Estero no iba a tener ningún tipo de progreso y entonces nos llevó a Buenos Aires en su vehículo al cuarteto con el que grabaríamos para el sello Juniors. En guitarra de ritmo con el bandeño Jerry Urquiza (Carlos Hugo, nunca más lo vi); en bata Mario Hugo Bustamante; y Aldo Cortés en bajo.

Recuerdo que con la cinta grabada fuimos al sello Phillips y dejamos la cinta para que la escucharan. A los dos días regresamos por el resultado. Allí nos encontramos con el ese entonces desconocido Piero, acompañado por el tanguero Ricardo Guzmán. Salió el encargado/secretario del capo (no me acuerdo quien era) y le dijo a Piero que lo aceptaron en Phillips. Nos vio a nosotros y dijo-¿Ah, ustedes?, esperen un momento-. Entró y salió rápidamente con nuestra cinta en sus manos. Yo le pregunté si la habían escuchado y me contestó:-No. De todos modos no interesa-. Después de esta contundente respuesta fuimos a ver a Tine y con él hicimos la grabación de Mi guitarra toca twist y María Laura (1963).

Las actuaciones que hicimos en Buenos Aires fueron pocas y gratuitas para promocionarnos, caso de la actuación en el club Vélez Sarfield en Una ventana al éxito del promotor Antonio Barros como Demonios del Ritmo.

los demonios 1964 velez

Los Demonios del Ritmo actuando en el Club Vélez Sarsfield, año 1964

Cabe agregar que Alberto Losavio fue integrante del Trío Los Halcones y padre de Tito Losavio de Man Ray. Y que en el sello Juniors trabajaba Juan Fernando  ‘ Bebu ‘ Silvetti Adorno, quien luego hizo un carrerón en México  y colaboró con miles de figuras llegando a ser arreglista de Luis Miguel. 

Por otro lado, debemos subrayar que Mi Guitarra Toca Twist es un instrumental propio de Hugo Juárez; María Laura es un rock en castellano compuesto por Aldo Nerio Cortés Luna. Ya en 1963, Santiago del Estero hacía sus propios temas de rock en castellano sin tener que esperar a los inicios de la historia oficial del género.

simple1

simple2

Fotos provistas por Juan Pablo Betarte

Este simple nunca fue reeditado en cassette o CD. Pero gracias al coleccionista uruguayo Juan Pablo Betarte, podemos disfrutarlo: con suma gentileza, él nos envió audios del disco sobre los cuales el propio Hugo Juárez aplicó sus conocimientos para restaurarlos. En el futuro podremos disfrutar una copia de aún mayor calidad, pero aún así lo que oiremos a continuación no deja resquicio a dudas: Mi Guitarra Toca Twist es un furibundo instrumental surfero, donde Juárez tira toda la carne al asador. Poco tiene de twist en sí y más bien demuestra el espíritu jazzero de Hugo.  Realmente estamos ante uno de los mejores registros de la olvidada música surf argentina, y en pocos años parecerá mentira que hayamos estado décadas sin poder conocerlo ni disfrutarlo.

El lado B no se queda atrás: un rockazo sin dudas, con Juárez ocupándose tanto de la voz como de la guitarra. Un golazo de media cancha la efímera pero poderosa intro de guitarra; y para aplaudir de pie todo lo que toca Hugo mientras canta. Las dotes del grupo se realzan en la sección instrumental. 

El segundo simple lo grabé en el año 1965. Ya prácticamente estaba radicado en Trelew y fui solo para cumplir con el mínimo de dos temas que decía el contrato. Grabé dos guitarras, contrabajo , batería y canto. Los temas se llaman “Lo que sufrí”, balada y “Primavera de mi corazón”, de ritmo rápido (no quiero catalogarlo como rock porque no lo es).

Demás está decir que les saqué canas verdes a los de la grabadora grabando todo lo que yo hice, mezclando y uniendo como fuere todo lo que hice en esa oportunidad. Jamás habían hecho una grabación multicanal, como se hace ahora (grabación de cinco canales hecha solamente con dos porque no había mas, jajajaja!).

A Hugo le ofrecieron también grabar para estas segundas sesiones en Junior ‘ s el tema Que te pasa gaucho, compuesto por Palito Ortega con letra de Dino Ramos (registro en SADAIC del 11 de marzo de 1965) (sadaic.org.ar; s/f).  Fue lanzado dentro de la banda sonora del film Fiebre de Primavera, protagonizado por Violeta Rivas Ortega con dirección y guión de Enrique Carreras; estrenado también el 11 de marzo de 1965. En cuanto a la propuesta del sello Junior ‘s, fue declinada por Juárez. 

tapa demonios ritmo

Segundo simple grabado por Hugo Juárez para el sello Junior’ s

I dreamed a dream that made me sad (concerning myself and the first few friends I had): los caminos bifurcados de Los Demonios del Ritmo

Pero las actuaciones gratis no le daban de comer a Los Demonios del Ritmo, Hugo le pidió a Losavio que lo ayudara para conseguir trabajo. Fue así que empezó a tocar en el teatro San Martín de la calle Corrientes, en la sección vermouth: era un show a las 19 horas, donde debía acompañar a variados artistas. Allí conoció a dos músicos trascendentales para su vida: Carlos HugoPinky ‘ Rubano y Cacho Valdez.  Los tres músicos se encontraron por primera vez cuando Hugo acompañaba a Chucho Mena, ‘ el iracundo del tango ‘.

Por cierto, bastante curioso que un tanguero fuera llamado con un término utilizado en Latinoamérica para hablar de los rockeros desenfrenados (antes de que la gran banda uruguaya existiera).

Chucho Mena tendría 22 años en ese momento. Era muy expresivo cuando cantaba. Recuerdo que, seguramente para avivar aún más la expresión que ponía, había momentos en que sus piernas se movían como si estuviera zapateando.

Demdel rit-BsAs

Formación de Los Demonios del Ritmo que grabó y tocó en Buenos Aires

En cuanto al resto de Los Demonios del Ritmo, los destinos fueron variados.  Aldo Cortés se fue para Río Gallegos, Santa Cruz; y fundó varios conjuntos en dicha ciudad. Jerry Urquiza Bustamante se volvieron músicos de acompañamiento de un ya exitoso Leo Dan.  Bustamante también aprovechó para estudiar con el maestro Alberto Julio Alcalá, según recordaba su amigo Mario Abraham. En 1970 decidió dejar el grupo y volver a Santiago para fundar… Los Demonios. Se sumaron músicos que ya habían pasado por la historia del grupo, como es el caso de Rubén Catán (Abraham, Mario; s/f). También fueron reclutados otros pioneros del rock santiagueño como Humberto Bernabé  ‘ Rudy ‘  Quiroga, quien a comienzos de los 60 había sido cantante de Los Rocklands donde también había pasado el demonio rítmico Johnny Delara (El Liberal; 6 de octubre de 2015).

Por esos primeros años 60 , Rudy llegó a grabar en Buenos Aires bajo el pseudónimo de Rudy Ray. Así fue que para el sello X (subsidiaria de RCA) registŕo su composición Lejos de Santiago, con el acompañamiento de la orquesta de José Finkel: pianista de la Jazz Casino donde tocaba Tito Alberti, padre de Charly Alberti; y compositor en 1956 junto al trompetista Julio Roth de uno de los primeros rocks argentinos en castellano, El Rock Boogie.

Lejos de Santiago es un tema que demuestra una tímida fusión entre aspectos rockeros y folclóricos, algo mas común en la época de lo que se piensa. Por otro lado, el estilo posee ciertas líneas de contacto con las grabaciones de Leo Dan,  o las efectuadas en el sello salteño H Y R por Jimmy Ken y Rubén Perkins. Esto demuestra la existencia de un estilo musical propio y característico de los músicos jóvenes de aquel Santiago.

Rudy Quiroga lanzó en 1965 un longplay para RCA, pero ya en una subsidiaria mayor  (RCA Camden) y usando su apodo de toda la vida. Lo acompañaba en arreglos Ángel ‘Pocho ‘ Gatti, gran nombre de nuestro jazz local. El coleccionista y músico Zelmar Garín digitalizó el disco en exclusiva para esta nota. Mirando las fotos de sus obleas,  se puede notar un pequeño detalle: no hay ningún cover. De sus once temas, solo dos no poseen colaboración alguna de Rudy: el twist Celosita con música de Rafael Eugenio Ledesma (el ‘Rafa ‘ Ledesma de los Rocklands santiagueños) y A.D. Fernández; y la balada Dulces Sueños de Ledesma con Carlos R. Flores. En el twist Nelly, colaboró con Rudy el guitarrista Víctor Acuña quien había sido primera guitarra de los Rocklands.  En el rock lento Dime Tu Tristeza se sumó el antes citado Carlos Alberto Buitrago, quien también fue empresario teatral (Pellettieri y Burgos; 2005; p. 519).

A decir verdad, son sorpresivos los arreglos de Pocho: más que elaborados y no dejan un cabo suelto. Al contrario de otros arreglistas de la época poco criteriosos o que usaban moldes muy estáticos para todos los artistas sin diferenciar estilos, Gatti se metió de lleno en su labor utilizando recursos muy variados y complejos. Rudy demuestra una buena voz y composiciones variadas e interesantes, con el valor agregado de no recurrir a ninguna versión. Los temas rápidos parecen signados por lo que marcábamos antes con el simple de Rudy Ray: una fusión entre twist y carnavalito, algo que se puede ver en otros artistas de la época (Los Indios; Facundo Cabral cuando era el Indio Gasparino; Los Quintos; Beto Fernán; Víctor Ibarra,; algunas grabaciones de Los Dukes, Los Jets y Mery Mitchel; los covers de Let’ s Think About Living del repertorio de Bob Luman emprendidos por Johnny Carel y Ricky Montana, etc)

Lamentablemente, la colaboración entre Quiroga y Gatti no siguió; había todas las condiciones en esa dupla para generar un éxito en nuestra música (pop)ular, que simplemente no se dio.

 Único LP de Rudy Quiroga, digitalizado por Zelmar Garín en exclusivo

para esta nota. 

Volviendo a los Demonios en su versión setentosa, estos grabaron un simple en 1978. Contenía los temas Bailando Junto A Ti  (composición de José Ricardo Santillán y Rudy) y Corazón , no la puedo olvidar (de Rudy). Gracias a los canales de Jorge Galian Marce Lugosi podemos disfrutarlos en Youtube. 

En el canal de Youtube de Mario Alejandro Bustamante (hijo de Mario Hugo Bustamante) se subió esta versión de I Put a Spell On You de Screamin’ Jay Hawkins emprendida por Los Demonios: muy buenos solos de guitarra eléctrica y mucha energía en la voz de José Ricardo Santillán. Este músico también tuvo una larga carrera folclórica y fue bajista de los Rocklands; tuvo un rol clave en el mítico Grupo SER de los 70, que amerita una nota específica. (Brevetta Rodríguez; 30 de mayo de 2019; y sderock.com.ar; 3 de julio de 2017 ).

Aquí, allá y en todas partes: los ajetreados viajes de Hugo Juárez y su banda con Tanguito

Pero volvamos a nuestro entrevistado, a quien ya lo tenemos radicado en tierras porteñas. 

Después de separarnos como Demonios del Ritmo comienzo a trabajar como músico profesional tocando de todo. Con los músicos destacados que toqué en ese entonces se comprende el trayecto de idas y venidas entre Buenos Aires, Santiago del Estero  y Chubut.

Toqué gracias a Pinky Rubano con el acordeonista/pianista Roberto Vignola, a quien conocía porque era integrante del famoso conjunto Los 4 Amigos, al que escuchaba por sus buenos guitarristas Condró y Costa. Vignola también fue director de la orquesta de Canal 13. Esto fue en el año 1963.

En Santiago del Estero acompañé a una gloria del acordeón que el nombre de su dúo era Washington-Bertolin; me gustaba como tocaba el guitarrista Washington. También con el saxofonista Carlos Datto, que por conversaciones con él me enteré que era el saxofonista de Carlinhos y su famosa bandita donde también estuvo el Palo Ortega: primero como bagayero (hoy se dice “plomo”) y después como baterista.

También con el gran clarinetista Barry Moral; con el organista ciego Horacio Larumbe en zapadas. Otro destacado fue Domingo Cura,  percusionista al que acompañé en Puerto Madryn, Chubut. También el bandoneonista y arreglador Mingo Moles (Trío Contemporáneo); gracias a él toqué en grabaciones con el violinista Antonio Agri y su noneto; el pianista José Colángelo; y muchos jóvenes de la época.

Hj con Chungo

Hugo Juárez en la orquesta de Carlos Datto. También se ve al músico Eduardo «Chungo» Rodríguez; y al pianista y arreglista Juan Alberto Pugliano. 

Así  fue que Hugo Juárez empezó a tallar un rol fuerte en la historia del rock porteño y bonaerense. En el libro de Víctor Pintos sobre Tanguito se menciona brevemente a un grupo en el que militó José Alberto Iglesias: Los Teletap. Una prueba más de que los mismos reconocidos del canon oficial hacían rock en castellano mucho antes de 1967. Sorprendentemente, el periodismo no ha ahondado en la historia de esta banda. Hugo hasta recuerda que ella poseia temas propios. 

Con Los Teletap, que era un conjunto cordobés que se había desarmado y quedaba solo el pianista apellidado Fontanet, hicimos varias actuaciones para cumplir los compromisos firmados por su representante en La Rioja. Huinca Renanco , La Pampa, San Francisco de Córdoba… Pinky Rubano armaba con los músicos de reemplazo el total del conjunto.

Como repertorio de los TeleTaps hacíamos dos temitas de ellos que no recuerdo nada, más repertorio de los conjuntos de la época; todo en castellano. En los temas que Tanguito no se acordaba la letra se mandaba una buena sanata.

El grupo originalmente era de la localidad cordobesa de Río Cuarto. Solo quedaba de sus filas originales el pianista Lito Fontanet, mano derecha de una compañía de seguros (Pintos; 1993; p. 55). Él decidió reclutar músicos en Buenos Aires usando el mismo nombre del grupo. Entre ellos estaba Hugo Juárez; el guitarrista Eduardo ‘ Chungo ‘  Rodríguez; Miguel Orlando ‘Bochi ‘ Iacopetti;  y el baterista Pinky Rubano. Un verdadero seleccionado, ya que Chungo venía de Jackie y los Ciclones y poseía una guitarra Repiso; en Los Telepap , se encargó de tocar el bajo. Años después, se volvería integrante de Los A Go Go.  Bochi , por su parte, se encargó de la guitarra rítmica. 

2020-05-16-093303_1920x1080_scrot

Eduardo ‘ Chungo ‘ Rodríguez tocando con su guitarra Repiso junto a Jackie y los Ciclones, en Radio Libertad. Foto provista por el baterista Miguel Ángel Nelson Falcione, quien en esta presentación tocó con el bombo de su otro grupo: The Ramblers.

Rubano ya había sido integrante de los Bobby Cats, grupo rockero de Billy Bond. A fines de los 60 formó el grupo Los Muñecos junto a Luis Ortega (hermano de Palito), antes de convertirse en un renombrado productor artístico de figuras como Valeria Lynch y Sandra Mihanovich. No fue el único con destino de éxito: Iacopetti se tornó compositor profesional, estando detrás de éxitos como Quieren Matar al Ladrón… sí, la de Cacho Castaña. También trabajó en RCA; fue productor discográfico; integrante del Grupo Guatambó; y lanzó algún simple solista. Sus composiciones también incluyeron músicas folclóricas, como la zamba Me gusta Jujuy cuando llueve. 

Bochi recordaba en el libro de Pintos que por Los Teletap también pasaron Cacho Valdez (futuro miembro de los Beat Boys en Brasil) , Chiche Calabaza y Néstor Rama (ob.cit; pp. 55- 56). En ese sentido, Hugo señala que en las veces que le tocó integrar Los Telepap no estuvieron estos tres músicos mencionados por Iacopetti.

Tanguito contando un rock de su autoría en castellano con Los Dukes, año 1964. Recuperado por el canal Beat- Crazes. El tema está inspirado abiertamente en Paralyzed, composición de Otis Blackwell interpretada por Elvis Presley

Según Bochi, Tanguito hizo cuatro giras con el grupo de las cuales él lo acompañó en dos. Recordaba que fueron primero a La Rioja para los carnavales del 64 y luego a Esquel y Bariloche. Agregaba que en 1965 viajó con la banda a la Fiesta de la Primavera en La Rioja ; tocaron en la fiesta de la empresa de Fontanet (ubicada en la intersección porteña de Cabildo y García del Río) ; y unos meses después se trasladaron a la ciudad cordobesa de Huinca Renanco, de donde era oriundo Fontanet. Iacopetti también aseguraba que en el repertorio incluían versiones de Be Bop A Lula de Gene Vincent; High School Confidential de Jerry Lee Lewis; y Land of 1000 Dances grabada originalmente por Chris Kenner. Todas eran tomadas vía las versiones de los Teen Tops Enrique Guzmán solista (en el último caso) (ob.cit; pp. 55- 56).

El testimonio de Hugo confirma la existencia de los viajes a Huinca Renanco y La Rioja, pero no recuerdas travesías a Esquel Bariloche junto a Los Teletap. Consultados para la presente nota, Félix Baliente, Ángel Gervasini y Jorge Roberto Tascón (miembros de la banda local Los Esqueletos) tampoco recuerdan visita alguna de este grupo. Gretel Korn, esquelense vinculada al mundo de la música por razones que veremos en futuras notas, concuerda en no abrigar memoria alguna sobre un toque de Los Teletap en su ciudad natal.  Solo Aníbal Romero de Los Esqueletos pudo manifestar que el grupo le suena.

En otra oportunidad íbamos en tren a La Rioja, un viaje largo y muy lento pero era conveniente por el equipamiento que llevábamos, porque realmente era barato y por supuesto el tren es mas espacioso que un ómnibus de larga distancia.
Yo iba sentado frente a Chungo y por supuesto compartiendo charlas musicales, de guitarras, etc. En unos asientos más adelante iba Tanguito franeleando su guitarra y tarareando/buscando melodías que tal vez formarían parte de sus propios temas.
De pronto se acerca un muchacho con una guitarra en mano y lo comienza » a taurear «, a cantarle y mostrarle lo que él tocaba e invitarlo a que tocara lo que él hacía y entonces «Tango» le dijo: –‘ No, mirá que yo no soy guitarrista, apenas toco para mi pero ellos sí- , terminó diciendo y señalándonos a nosotros, Chungo y yo.
El muchacho «se vino al humo» rápidamente y nos taureó a los dos. Con Chungo nos miramos y le preguntamos es lo que quería tocar con nosotros – Mirá que tocamos jazz,tango y de todo pero no tenemos guitarras criollas porque vamos a laburar con guitarras eléctricas -, le dije yo y entonces él nos dijo: – Pídanle la guitarra a su amigo y yo les presto la mía,así puedo ver lo que tocan-.
Gentilmente Tanguito nos prestó la suya y el muchacho la propia. Comenzamos con un tema de jazz que si bien no recuerdo exactamente, el tema elegido era algo así como Rag de la calle 12 para mostrar la agilidad guitarrística con su correspondiente improvisación.
Estábamos en medio de la interpretación cuando el muchacho que no salía de su asombro dijo:-‘¡Mmm… En donde me metí.,lo que tocan estos tipos !’-.
Al terminar la interpretación se excusó diciendo que él no podría tocar nada con nosotros pero siguiendo la charla y enterado que íbamos a La Rioja nos dijo que él era riojano y gentilmente nos haría conocer algunas cosas de su provincia. Con su Jeep nos paseó por todas partes y hasta nos llevó a una bodega a probar un buen vino riojano.

Sur del sur: cuando Hugo tras bajar a Buenos Aires, bajó a Chubut (¿o subió?)

Hugo empezó también a realizar sus primeros viajes al sur del país , zona con la que luego desarrollaría una relación muy especial hasta convertirla en su segundo hogar. En su primer viaje lo acompañó Miguel Monti, alias Miguelito Fender: apodado así por su exclusivo bajo Fender Precision Bass, comprado a los Teen Tops en una visita al país (Ábalos; 2015; p. 250). Su primer grupo habían sido Los Bobby Cats, donde convivió con Billy Bond y Pinky Rubano. Con el correr de los años, él sería integrante de La Barra de Chocolate de Pajarito Zaguri y realizaría algunos ensayos con Viento, efímero trío completado por Rodolfo García Edelmiro Molinari (Mockert; s/f).

LA_BARRA_DE_CHOCOLATE_1970_DCMP

             Tapa del álbum de La Barra de Chocolate, con Monti en sus huestes

Se acercaba el final del año 1963 y en Buenos Aires no quería quedarme y le dije a mi amigo el guitarrista Cacho Valdez que si le salía algún laburo de gira y él no podía hacerlo que me lo pasara a mí. Pasaron dos días y lo llamo por teléfono nuevamente y me dijo que había una gira para ir al sur, a la Patagonia y que me pasaba ese laburo . Éramos un cuarteto de acompañamiento formado para esa cuestión, todos llegados por caminos independientes: Juan Carlos Ciricco en Bata, Miguel Monti en bajo. Para llevar compañía de alguien conocido lo puse como guitarra rítmica a Jimmy Ken y yo en guitarra líder.

El cantante que acompañamos se llamaba Hugo Díaz (Igual que el armoniquista famoso), hijo de un boxeador famoso: Mario Díaz , tal vez campeón argentino. Fuimos en una Combi de él y paramos primero en Rawson en casa de unos amigos/parientes de Mario Díaz. Al día siguiente fuimos a Trelew (dieciocho kilómetros de distancia). Allí hicimos dos actuaciones y rompimos relaciones con Mario Díaz porque estaba visto que habría problemas de guita. Un señor dueño de una confitería bailable le gustó el trío y quiso contratarnos “pero sin el cantante”, refiriéndose a Hugo Díaz… Al conjunto le puse (¡Oh!) los Demonios del Ritmo. Jimmy  Ken se quedó dos meses y regresó a Bs As.y quedamos en trío.

Con ese trío nos quedamos por lo menos cuatro meses laburando seis días a la semana y Ciricco regresó a Buenos Aires. Lo suplantó Nando Gonzalez (Fernando), baterista trelewense quien tenía una batería con parches de cuero y tocaba bastante bien porque había estado con viejas orquestas de la zona. Sorprendentemente Nando sabía leer música.Con él tocamos dos meses más y con Monti regresamos a Buenos Aires.

20200419_122300

Juan Carlos Ciricco, Hugo Juárez y Miguel Monti tocando en Trelew

Fernando ‘ Nando ‘ González es una figura de la que nos habló Juan Manuel Medina en la entrevista que publicamos hace unos días sobre los orígenes del rock en Trelew, Rawson y Puerto Madryn. Toda la información que comentaremos ahora proviene de dicho reportaje, excepto donde se indique. Nando había pasado por la orquesta Florida Jazz de Rawson (Rawson Visión; agosto de 2015); Medina recuerda que estuvo en la también rawsense Swing Jazz: la primera agrupación musical que tocó rock en Chubut, allá en el año 1958.

     Simple solista de Jimmy Ken, con acompañamiento de la orquesta de Tommy Farrell (alias de Alberto Luis Conles)

Medina agrega que Nando integró en Trelew a fines de los 60 y comienzos de los 70 la Jazz Las Vegas junto al pianista Luis Ángel Terraza y el clarinetista Jorge Rubbo; pareciera que allí también pasó el baterista Luis Oscar Zito, otro ex Swing Jazz que luego habría de trabajar en la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco (González; noviembre de 2018 y de abril de 2020). La orquesta animaba un local bailable también llamado Las Vegas (Medina; 14 de agosto de 2013).

Rubbo era oriundo de Buenos Aires y en su llegada a Chubut se incorporó a la Banda de Música de la Policía provincial, ubicada en Rawson (Calle y Medina; 30 de octubre de 2014). De allí pasó a la Swing Jazz, según ha apreciado Hugo Juárez al revisar fotos de la orquesta: es que este conjunto se formó con los integrantes de la Banda Policial provincial, un fenómeno que no hubiera ocurrido si en 1955 Chubut no hubiera dejado de ser territorio nacional para convertirse en provincia. Rubbo se instalaría luego en Trelew, fundando su famosa tapicería y la orquesta del barrio INTA (
Ticcera; 16 de noviembre de 2017). En cuanto a Luis ‘ Coco ‘ Terraza, él era oriundo de Rawson e hijo de un famoso prestidigitador y multinstrumentista. Fue dueño a comienzos de los 60 de la conocida confitería El Camarón, ubicada en Puerto Rawson. Luis también fue ajedrecista y publicó problemas relativos a este deporte en el diario chubutano La Jornada. Además, mantuvo una profusa labor como escritor poeta. (Medina; 24 de abril de 2015). Tenía hermanos músicos como Micho Terraza, quien pasó por la Florida Jazz (Rawson Visión; agosto de 2015).

46844418_2255651134458955_8731752981889810432_n

Orquesta Swing Jazz, foto subida por Fernando González

…. Y más me lo recuerda mi larga ausencia: coda para Santiago y Buenos Aires, obertura para Chubut

Volviendo a Hugo y sus odiseas, llegamos ya a 1966. Año en el cual visitó Esquel junto a Miguel Monti Pinky Rubano.  Músicos locales antes mencionados en la nota como Jorge Tascón recuerdan su visita con una banda llamada…los Kings Rockers. ¿Una nueva ave fénix rockera?

Como había que ponerle un nombre al trío,es posible que haya utilizado el nombre Kings Rockers. El contrato duró 4 o 5 meses. Monty y Rubano regresan a Buenos Aires y yo voy a Trelew con el propósito de establecerme allí. [ Nota 2 al pie del editor ]

  monti y de pie rubano

De pie Pinky Rubano; sentado a la izquierda Miguel Monti y a la derecha Hugo Juárez. Sacada en el viaje a Esquel.
                                           …………………………………………………………..
Comenzaba así una segunda parte en la vida profesional de Hugo. Tras ser pionero absoluto en su Santiago natal,  se le deparaba el destino de repetir esa historia en la Patagonia. Quedarán para una segunda entrega sus andanzas chubutanas. Por el momento, solo nos queda agradecerle a Hugo su entera predisposición y suma paciencia para el presente reportaje. Mantuvimos un contacto permanente desde hace semanas, y él nos aclaró todos los puntos armando un puzzle que parecia casi imposible. ¡Gracias maestro Juárez, por ser uno de los que fundaron todo lo que amamos!
                          ………………………………………………………………
                                                   Notas al pie
1) Jinetes en el Cielo es la traducción de (Ghost) Riders in the Sky, canción de Stan Jones grabada por primera vez en 1949 merced a la interpretación de Burl Ives. La primera versión argentina fue lanzada el miércoles 22 de marzo de 1950 por la orquesta Héctor y su Jazz, en la voz de Lilian Red (Nélida Esther Corriale) acompañada del Cuarteto Vocal de la orquesta. En cuanto a Rock del Río Rojo, es una versión que los mexicanos Teen Tops hacían de Red River Rock; clásico de la banda estadounidense Johnny and the Hurricanes, que en realidad era una reversión de la canción tradicional Red River Valley lanzada originalmente en 1928 por Hugh Cross y Riley Puckett. 
Como vemos, no hay vino nuevo en odres viejos. Los borrachos que dicen cosas como «hacer covers no es el comienzo de nada» olvidan que la mayoría de las canciones que disfrutamos hunden sus raíces en las brumas del tiempo.
2)  ¿Cómo estaba integrado el repertorio de estos viajes a Trelew y Rawson? Hugo recuerda temas como Unchain My Heart (composición de Teddy Powell y Bobby Sharp lanzada originalmente en 1961 por Ray Charles; aquí fue popular por la versión de Trini Lopez de 1963, que suscitó el cover en castellano de Leo Dan grabado en 1964); Mi Promesa, tema propio de la banda argentina Los Pick Ups; La Bamba; Popotitos, cover que hacían los Teen Tops de Bony Moronie de Larry WilliamsCelia de Leo Dan; Ti guarderò nel cuore (canción italiana de Nino Olivieiro Riz Ortolani lanzada en 1962; sus versiones estadounidenses hechas por artistas como Steve Larence Vic Dana suscitaron a su vez contrapartidas en castellano como las de Los Cinco Latinos Enrique Guzmán); Il Mondo (otra canción italiana, de Jimmy Fontana quien también la grabó en castellano; Hugo y sus colegas usaban esta versión); Eso, eso, eso de los argentinos Homero y Virgilio Expósito grabado originalmente en 1960 por el trío italo-uruguayo Los TNT; instrumentales como Czardas de Vittorio Monti; El vuelo del moscardón de Rimsky Korsakov (muy común en las bandas de surf en ese entonces); o versiones sin letra de Moritat Von Mackie Messer (canción alemana de Bertroldt Brecht Kurt Weill lanzada originalmente en 1929) y On The Street Where You Live de Alan Jay Lerner Frederick Loew grabada originalmente por John Michael King en 1956. También incluían tangos como Canaro en París (con música de Juan Caldarella y Alejandro Scarpino ; y letra de José Scarpino, grabado originalmente por la orquesta de Francisco Canaro en 1926); y el vals Ilusión de mi vida con música de Feliciano Brunelli y letra de Nolo López. 
Fuentes bibliográficas
Artículos del blog Desculando Guitarras de Hugo Juárez: http://desculandoguitarras.blogspot.com/
El coleccionista Juan Pablo Betarte.
El músico y coleccionista Zelmar Garín
Testimonios de Félix Baliente, Ángel Gervasini , Gretel Korn, Aníbal Romero y Jorge Roberto Tascón.
Testimonio del cantante Julio César Palacios.
Buscador de sadaic.org.ar
Entrevista a Juan Manuel Medina, realizada por Universo Epígrafe. Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=zNJ3JDwzR3w
Extractos de un reportaje inédito realizado por Fabio Gustavo Medín a Hugo Juárez.
El sitio discogs.com
Ábalos, Ezequiel. 2015. Rock de acá 1.Ediciones de autor.
Abraham, Mario.  16 de noviembre de 2011. Palabras por la partida de Mario Hugo Bustamante, publicadas originalmente en el diario El Liberal y compartidas en el Facebook Historia del Rock en Santiago del Estero. Disponible en: https://www.facebook.com/photo.php?fbid=115597788553513&set=a.101095583337067&type=3
Brevetta Rodríguez, Miguel.. 30 de mayo de 2019. JOSE RICARDO SANTILLAN ENTRE EL RECONOCIMIENTO Y EL OLVIDO. Disponible en: https://brevetta.blogspot.com/2019/05/jose-ricardo-santillan-entre-el.html
Calle, Nelly y Medina, Juan Manuel.  30 de octubre de 2014. Comentarios en publicación del grupo de Facebook Recuerdos del Valle Inferior del Río Chubut. Disponible en: https://www.facebook.com/groups/recuerdosdelvalleinferior/permalink/10152818576499920/
El Liberal. 6 de octubre de 2015. «Rudy» Quiroga: «se fue de gira» un pionero del rock en Santiago del Estero. Disponible en: https://www.elliberal.com.ar/noticia/213300/rudy-quiroga-se-fue-gira-pionero-rock-santiago-estero
González, Fernando. Publicación del 25 de noviembre de 2018 en el grupo de Facebook Recuerdos del Valle Inferior del Río Chubut. Disponible en: https://www.facebook.com/groups/recuerdosdelvalleinferior/permalink/10156766683844920/
González, Fernando. Publicación del 1 de abril de 2020 en el grupo de Facebook Recuerdos del Valle Inferior del Río Chubut. Disponible en: https://www.facebook.com/groups/recuerdosdelvalleinferior/permalink/10158058749304920/
Medina, Juan Manuel. 14 de agosto de 2013. Comentario en publicación del grupo de Facebook Recuerdos del Valle Inferior del Río Chubut. Disponible en: https://www.facebook.com/groups/recuerdosdelvalleinferior/permalink/10151808677024920/
Medina, Juan Manuel. 24 de abril de 2015. Comentarios en publicación del grupo de Facebook Recuerdos del Valle Inferior del Río Chubut. Disponible en: https://www.facebook.com/groups/recuerdosdelvalleinferior/permalink/10153260322814920/
Mockert, Tata. Sin fecha. Rock argento. Aquelarre. Disponible en: http://musicaypropuestas.com.ar/archivos/revistas/LR17/files/assets/basic-html/page78.html
Pellettieri, Oscar; y Nidia Burgos. 2005. Historia del teatro argentino en las provincias. Editorial Galerna.
Pintos, Víctor. 1993. Tanguito. La verdadera historia. Editorial Planeta.

Rawson Visión. Agosto de 2015.»  QUIQUE ” RUBINO: De baile en baile con la música del grupo Florida Jazz. Recuperado en una publicación del grupo de Facebook Rawson Olvidado, posteada por Miguel Machesich. Disponible en: https://www.facebook.com/groups/2057973217761135/permalink/2212377608987361/

sderock.com.ar. 3 de julio de 2017. Julio de 1972 El primer recital de rock en Santiago del Estero. Disponible en: http://www.sderock.com.ar/julio-1972-grupo-ser/

Tissera, Delia. 16 de noviembre de 2017. Testimonio concedido al Canal 12 Trelew- Rawson TV. Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=q3W-wj02orI

Fuente de las imágenes

Archivo personal de Hugo Juárez. Agradecimiento especial a Roxana, quien ayudó muchísimo en el envío de estas fotos.

Archivo personal de Miguel Ángel Nelson Falcione.

Archivo personal de Jorge Mario ‘ Jerry  ‘ Rodríguez

Colección personal de Juan Pablo Betarte

Colección personal de Zelmar Garín

Foto de la orquesta Swing Jazz subida por Fernando González en el grupo de Facebook Rawson Olvidado

todocoleccion.net/discos-vinilo/los-teen-tops-su-primer-album-edicion-original-uruguay-coleccionistas-rock-roll~x101074074

naveargenta.blogspot.com/2016/06/la-barra-de-chocolate-simples-1970-1973.html

discogs.com/es/Antonio-Prieto-Rock-Lento-Mexicano/release/3395120

Fuente de los videos

Canales de Youtube Antonio Pignatiello; Dardo Molina Chazarreta; Felipe Pinto: Folklore y Tango Argentino; Flor del Ceibo; Gastón Merino; Heinz Becker; Jorge Galian; Los Cinco Latinos-Tema;  Marcelo Chiapparini; Marce Lugosi; Mario Alejandro Bustamante; MrRaymem; nosediver; Orfeon; R. Schweizer; oscarvampiro; Palan09; SOM E CULTURA; Terek Kernkraft; TS Music Time Machine; Tralha Brasil; VintageMusicFm; y Will Adams.